Tenis

Rafa Nadal necesitará cinco meses para recuperarse

El mallorquín fue intervenido el viernes del psoas y de una lesión antigua en la cadera

Rafa Nadal, en una imagen de archivo.

Rafa Nadal, en una imagen de archivo. / EFE

Manuel Fernández

Rafa Nadal ya conoce el estado de su psoas. El mallorquín no volverá a las pistas, al menos, hasta diciembre de este año. Los resultados de la "pequeña intervención" que se le realizó el viernes por la noche no dejan lugar a las dudas: debe estar parado hasta octubre. A partir de ahí, tendrá tiempo para realizar una pretemporada para intentar volver a una pista de tenis en diciembre.

”La cirugía ha resultado positiva, consistió en la limpieza de las zonas fibróticas y degeneradas del tendón tanto a nivel proximal como distal, así como la sutura del mismo para reforzarlo adecuadamente”, según ha comunicado su equipo en una nota de prensa. ”En un segundo tiempo se regularizó también una lesión antigua del labrum de su cadera izquierda que con toda seguridad ayudará a la mejor evolución del tendón”, se añade.

”Rafa iniciará su rehabilitación funcional progresiva en unas horas y el proceso de recuperación normal está estimado en 5 meses, siempre teniendo en cuenta el respetar los tiempos biológicos de dicha estructura”, concluye el comunicado.

Nadal se sometió en la noche del viernes se realizó en la Clínica Teknon de Barcelona a una "pequeña intervención" por artroscopia para revisar la lesión del psoas ilíaco de su pierna izquierda que le obligó a abandonar el pasado mes de enero el Open de Australia y a perderse todos los torneos disputados desde entonces, según informó su equipo de prensa en un comunicado. La intervención fue efectuada por los doctores Marc Philippon, un referente mundial en lesiones de cadera, Jaume Vilaró y Ángel Ruiz-Cotorro.

Nadal se ha perdido la gira por Estados Unidos, los Masters 1000 de Indian Wells y Miami y la temporada de tierra al completo, el Masters 1000 de Montecarlo, el Conde de Godó de Barcelona, el Masters 1000 de Madrid y el de Roma.

Y Roland Garros, su ausencia más dolorosa. Una baja que le ha permitido vivir un hecho casi inédito desde que es profesional: no celebrar su cumpleaños en París.