El pleno del Congreso aprobó en su último trámite la ley que define los servicios de pago y los proveedores autorizados para ofrecerlos, con la que se traspone la directiva europea para este tipo de actividades en España.

A partir de su entrada en vigor, los gastos de las transferencias bancarias deben repartirse entre los usuarios, salvo si el cliente llega a un acuerdo distinto con su entidad.

Asimismo, se definen las nuevas entidades de pago, los requisitos de transparencia en los servicios de pago, y los derechos y obligaciones derivados de su prestación.

Diversas organizaciones de Consumidores han coincidido en señalar que la Ley de servicios de pago, aprobada en el Congreso, va a encarecer las compras con tarjetas de crédito, por lo que recomiendan pagar con dinero en efectivo.

Desde la asociación FACUA-Consumidores en Acción, Rubén Sánchez ha afirmado que se ha optado "por la vía fácil" en el conflicto de las comisiones excesivas que se cobran por los pagos con tarjeta, ya que en lugar de imponer limitaciones "al poderoso sector de las tarjetas de crédito", se traslada el problema "a la parte más débil del mercado, los consumidores".

"Es una medida cobarde", ha señalado Sánchez, quien ha comentado que va tener un efecto negativo al encarecer al consumidor final el predio de muchos productos y servicios.

"La única recomendación al consumidor es que usen menos las tarjetas", y que cuando vayan a realizar una compra con ella sean conscientes de que pagar con tarjeta es más caro que pagar en efectivo, ha concluido.

El portavoz de la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), Antonio López, ha explicado que el contenido de la ley le parece "ambiguo" pero que se van a oponer si lo que se pretende es cobrar al usuario un tanto por ciento por utilizar la tarjeta.

El usuario va "a castigar" a esos comercios y van "a penalizar" a las tarjetas tradicionales frente a las de fidelidad de los grandes almacenes, ha considerado.

Por su parte, el secretario general de la Unión de Consumidores de España (UCE) de la Comunidad de Madrid, Eustaquio Jiménez, ha dicho que grabar el precio de un producto al consumidor es "inaceptable e inasumible".

"Vamos a pedir a los usuarios que dejen de utilizar las tarjetas de crédito porque no tienen que pagar un sobrecoste con una modalidad de pago que venían utilizando toda la vida", ha añadido Jiménez, quien ha aseverado que la nueva normativa va "en contra de fomentar el consumo".