Este martes, el Tesoro cerró una emisión de Letras del Tesoro a 12 y 18 meses en la que consiguió 4.500 millones de euros pero realizando un verdadero esfuerzo respecto a los tipos de interés, un 3,76% para las Letras a 12 meses y un 3,98% para las letras a 18 meses.

Para muchos analistas, esta rentabilidad supone un obstáculo en la captación de recursos por las entidades financieras, ya que la rentabilidad es superior a la de muchos depósitos, pero ¿es comparable una Letra a un depósito?

En primer lugar no son mucho los particulares los que contratan Deuda Pública a corto plazo, aunque existe la posibilidad de hacerlo directamente por Internet, abriendo una cuenta directa con el Banco de España y con firma digital o DNI electrónico, no es una opción mayoritaria, pero además existen muchos otros puntos que favorecen los depósitos frente a la deuda pública.

Liquidez: Los depósitos se puede cancelar antes del vencimiento, teniendo como mucho una penalización igual a los intereses generados y en muchos casos sin ningún coste. Las Letras se negocian en mercados organizados y si bien es cierto que se puede vender, el precio lo determina el mercado y si existe demanda de compra.

Seguridad: Si vendemos la Letras antes de su vencimiento podemos obtener ganancias o pérdidas como cualquier valor de Renta Fija, y en la coyuntura actual las pérdidas son más que probables ¿Por qué? El precio de Bonos, Obligaciones o Letras depende fundamentalmente de como varían los tipos y el tiempo que quede para su vencimiento. Es decir si los tipos siguen subiendo, la rentabilidad de las Letras nuevas será más atractiva y el precio de las actuales bajará. Mientras con los depósitos el capital está 100% garantizado.

Cobro de intereses: Las Letras se compran al descuento, es decir obtenemos 1.000 euros por letra a su vencimiento invirtiendo esta cantidad menos el interés, con el 3,76% actual 963,76 euros. Tenemos que esperar que cumpla los 12 meses para cobrar el rendimiento, mientras que los depósitos a un año o más lo normal es que se cobre los intereses cada mes.

Fiscalidad: En el cobro de los intereses de los depósitos ya se retienen el 19% del IRPF, mientras en las Letras no existe retención a cuenta sobre dicho rendimiento, pero tributa igualmente al 19% o al 21% si la ganancia es superior a los 6.000 euros, es decir se tributa en el momento que hagamos la declaración de la renta.

Todas estas consideraciones las tiene que tener en cuenta el ahorrador a la hora de elegir donde depositar su dinero, más como se puede ver en nuestro comparador de depósitos existen aún productos que superan a las Letras en rentabilidad.