El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha asegurado que el país no está para "conflictividades" y que en una situación de emergencia como la actual sería un "profundo error" y una "irresponsabilidad" que los sindicatos convocasen una huelga general.

En una entrevista en El Mundo, Rosell ha señalado que no cree que los sindicatos españoles estén por "esa vía", ya que son "serios y responsables aunque tengan mala prensa" y, en este sentido, ha añadido que no participa en ese "pim, pam, pum" en contra de ellos.

Asimismo, ha lamentado que los empresarios y los sindicatos estén siendo "linchados" por el tema de las subvenciones a la formación, cuando esta es imprescindible.

Con respecto a las nuevas previsiones macroeconómicas para este año, Rosell ha agregado que, "guste o no", los datos del Gobierno son "realistas", y ha subrayado que no se puede pasar del déficit del 8,5 % que se tuvo en 2011, un proceso que, en su opinión, será mucho más flexible de lo que se dice.

En este sentido, ha calificado de "razonable" la cifra de 118.565 millones de techo de gasto y ha aplaudido las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para atajar el déficit de una economía "enferma" en la que se tienen que acometer "cosas dolorosas".

Para finales de este año o para el que viene, Rosell prevé que las cosas mejoren, se tenga "algo" de crecimiento, se recupere la confianza, se exporte más y se empiece a "ver la luz".

Además, el presidente de la CEOE ha reclamado medidas para evitar la economía sumergida, que está por encima del 20 %, al tiempo que ha asegurado que con la reforma laboral no hay "barra libre" para despedir, ya que con ella se creará empleo a medio y largo plazo y se reducirán los ERE y el absentismo laboral.

Preguntado por si la movilidad geográfica es un problema a la hora de buscar o cambiar de empleo, Rosell ha indicado que la legislación vigente establece un tope de 35 kilómetros que hay que cambiar, y ha reconocido además que se debe estudiar si se puede obligar a que los parados realicen trabajos sociales si quieren cobrar el desempleo.

Sobre la decisión del Gobierno de adelantar el pago a los proveedores, Rosell ha indicado que es un "respiro importantísimo" para las empresas, teniendo en cuenta que solo en los ayuntamientos se habla de una deuda contraída de 30.000 millones de euros.

El presidente de la CEOE ha señalado además que si a un cliente le proponen, a cambio de pagarle, una quita de la cantidad que le adeudan las administraciones públicas del 5 o 10 %, la mayoría de los empresarios lo apoyaría.