Esta reestructuración del capital de la entidad valenciana, que fue intervenida por el Banco de España el pasado mes de diciembre, será aprobada en la junta de accionistas que se celebrará el próximo 14 de mayo, o al día siguiente en segunda convocatoria.

Tras meses de intervención, el Banco de España ha decidido reducir el valor del capital social de la entidad de 123 a 98 millones de euros para tranquilidad de los pequeños accionistas, que se habían movilizado para evitar que el valor se viera reducido a cero, como ocurrió con UNNIM y también con el Banco CAM.

Tras esta decisión, comunicada anoche, las acciones del Banco de Valencia se disparaban en bolsa más del 30 por ciento.

La entrada del FROB se hará mediante una operación acordeón (reducción de capital y una ampliación posterior) y dejará reducido el peso de los actuales accionistas al 9 por ciento, de los que prácticamente la mitad son pequeños inversores en bolsa.

Al mantener un pequeño porcentaje, los accionistas se aseguran además la posibilidad de ejercer sus derechos políticos una vez la entidad sea vendida.

Antes de la intervención, el 39 % del banco estaba en manos de Bancaja Inversiones S.A. (BISA), entidad que está en manos de Banco Financiero y de Ahorro (BFA) -la matriz de Bankia-, y que detenta de manera indirecta, por tanto, el 27 % de la entidad.

BFA-Bankia se ha negado a recapitalizar el Banco de Valencia por considerarlo una participación no estratégica pese a que fue una de las filiales más preciadas de Bancaja, ahora integrada en el grupo que preside Rodrigo Rato.

El resto de los accionistas significativos del Banco de Valencia lo conformaban a finales de año sociedades patrimoniales valencianas, como Unión de Valores (3,5 %), Libertas 7 (5 %), que está controlada por la familia Noguera, y Sorman (3,4 %), vinculada a la familia Soriano. El resto cotizaba en bolsa.

Tras la operación acordeón, Bancaja Inversiones tendrá el 3,51 % (un 2,43 % BFA de manera indirecta). Esta reducción no tendrá impacto en las cuentas de BFA-Bankia, que ya había provisionado el 100 por cien de su participación en el Banco de Valencia, por unos 500 millones brutos, según fuentes de la entidad.

En la junta de accionistas de mayo, se aprobará reducir el capital social de la entidad de 123 a 98 millones de euros, mediante la reducción del nominal de la acción de 0,25 a 0,20 euros.

Tras esta reducción, el FROB suscribirá una ampliación de capital de 1.000 millones de euros, mediante la emisión de 5.000 millones de acciones, lo que le otorgará el 91 % de la entidad.

Con el control mayoritario del banco en su poder, el FROB podrá vender la entidad a través de la subasta competitiva que se inició el pasado martes pasado, con el reparto del cuaderno de venta a los interesados.

Probablemente el FROB venderá solo su participación, en tanto que el resto seguirá cotizando en bolsa.

Hoy, los accionistas del Banco de Valencia agrupados en la asociación Pro Banco Valencia dijeron que esperan que Bankia les "agradezca públicamente las gestiones" que han evitado que el valor de la acción pase a ser cero.

También la alcaldesa de Valencia, Rita Barbera, ha alabado la decisión del Banco de España de "finalmente dar valor a las acciones del Banco de Valencia".