El sindicato de pilotos Sepla-Iberia ha pedido al Ministerio de Fomento que imponga un laudo arbitral para solucionar el conflicto en Iberia a raíz de la creación de la "low cost" Iberia Express que ha provocado ya 14 jornadas de huelga y 28 más convocadas hasta el próximo 20 de julio.

El presidente del Sepla en Iberia, Justo Peral, ha explicado hoy en una rueda de prensa que ya existen circunstancias suficientes para justificar una actuación de este tipo, dado que no hay posibilidad de negociación en el ámbito natural que es la empresa, donde debería resolverse el conflicto.

Según Peral, los gestores de Iberia desprecian la negociación y ha explicado que el Gobierno ofreció a Iberia la posibilidad de que el Sepla pusiese una demanda y le pidió a la empresa que acatase la sentencia en primera instancia.

Sin embargo, Iberia se negó al considerarlo un "acto hostil" y que, si se hacía, rompería la mediación inmediatamente, porque, en opinión de Peral, "sabe que la sentencia iba a ser favorable" a los pilotos, así como a la posibilidad ofrecida por el mediador -el exministro Manuel Pimentel- de arbitraje voluntario.

A ello se suma el hecho de que "se trata de un ataque al interés de España" y a una de sus industrias estratégicas como es el transporte aéreo por parte de los británicos.

Por tanto, ha explicado que los pilotos no van a crear artificialmente unas condiciones para que el Gobierno imponga un laudo, tal y como ocurrió ya en Iberia en 2001, ya que, a su parecer, éstas ya existen, pero ha asegurado que seguirán haciendo huelgas y tomando todas las acciones legales que estén en sus manos para evitar lo que está ocurriendo en la compañía.

En su opinión, en 2015, Iberia Express "ya habrá quebrado o se habrá fusionado con Vueling", porque una compañía de bajo coste necesita disponer de al menos 190 aviones para ser viable (Iberia Express tiene previsto tener 40), dado que con poco volumen es imposible amortizar los costes que supone cada asiento.

Peral ha insistido en que el proyecto va a fracasar, pero "es lo que quiere IAG", el hólding que engloba a British Airways (BA) e Iberia tras su fusión.

Para Peral, se trata de una estrategia diseñada desde Londres, ya que tanto Iberia como BA saben que lo único que garantizaba la españolidad de Iberia y de las infraestructuras de la T4 de Barajas en los acuerdos de fusión era el convenio de pilotos que ahora atacan.

A su juicio, hay directivos españoles dispuestos a cobrar unas cantidades millonarias por el plan de segregar y destruir Iberia encargado por los británicos con el objetivo de entregarles los trozos de Iberia, para que BA financie su crecimiento y desarrollo.

Ha recordado que con la creación de Iberia Express quedan amenazados 8.000 puestos de trabajo en Iberia, mientras que en BA se han generado 10.00 empleo nuevos.

Por otro lado, ha asegurado que la jornada de paro de hoy, la décimo-cuarta y la segunda de una nueva tanda de treinta, se está desarrollando con "absoluta normalidad" y que los servicios mínimos se están cumpliendo al 100 %.