El Gobierno está satisfecho con el desarrollo de la Cumbre por considerar que los líderes europeos se disponen a aceptar la mayoría de las peticiones españolas en materia de lucha contra el paro juvenil y financiación para las pymes.

"Estamos satisfechos porque las concusiones reflejan aquello por lo que hemos batallado en las últimas semanas", han explicado fuentes de Moncloa.

En primer lugar, España recibirá 1.900 millones de euros de la UE para el empleo juvenil entre los años 2014 y 2015 gracias al adelanto del nuevo fondo de 6.000 millones de euros que tiene previsto aprobar el Consejo Europeo, según los cálculos de Moncloa.

El acuerdo sobre el presupuesto de la UE para el periodo 2014-2020 alcanzado este jueves permite además, señalan las fuentes, que este dinero pueda movilizarse en plazo.

En el Gobierno se resta importancia a que las conclusiones de la Cumbre no recojan expresamente la petición del presidente, Mariano Rajoy, de que las bonificaciones para contratos juveniles no computen como déficit. Estas ayudas, sostienen, se podrán financiar ahora con dinero europeo y además el texto incluye varias referencias a la necesidad de flexibilizar el déficit.

Por lo que se refiere a las pymes, Moncloa cree que el acuerdo político que saldrá de la cumbre para que se ponga en marcha un plan conjunto entre la Comisión y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) para aumentar el crédito recoge todas las peticiones españolas: que se aumente el dinero que el BEI dedica a las pymes, que el BEI otorgue garantías a los bancos sobre nuevos créditos a estas empresas, y que se desarrolle un programa de ayuda al comercio.

Para España, de las tres opciones que ha planteado la Comisión para movilizar fondos extra para las pymes usando como aval los fondos estructurales, la más interesante es la tercera, que permitiría llegar a 100.000 millones de euros. Aunque la decisión final se deja para julio, Moncloa valora que existe ya un acuerdo político entre los líderes.

Por lo que se refiere a la intervención del Banco Central Europeo (BCE), el Gobierno apunta que no habrá un mandato del Consejo Europeo porque supondría una vulneración de su independencia, pero no descarta que se discuta.