La eliminación de la paga extraordinaria de Navidad a los funcionarios y altos cargos públicos dependientes del Gobierno central supuso el año pasado un ahorro de 985,55 millones de euros.

Así consta en una respuesta del Ministerio de Hacienda a la diputada socialista Susana Sumelzo, quien remitió una pregunta parlamentaria al Ejecutivo para saber qué ahorro en fondos públicos se conseguiría con la medida y a qué se destinaría ese dinero.

En la respuesta, que recoge Europa Press, el Gobierno señala que la supresión de la paga extra aprobada por decreto en julio de 2012 conllevó un ahorro de 985,55 millones de euros en dicho ejercicio presupuestario, teniendo en cuenta únicamente las nóminas de los empleados públicos y altos cargos del ámbito del Estado.

Además, aunque no precisa el destino concreto de ese dinero, el Gobierno recuerda que sus prioridades tras la consolidación fiscal y la estabilidad de las cuentas públicas son el gasto social --especialmente, las pensiones--, la educación, la sanidad y el I+D+i.

Más de 6.000 millones de ahorro

Cuando se aprobó el decreto ley que incluía este recorte puntual de las pagas extras, el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta cifró en 6.315 millones el ahorro conjunto de todas las medidas que afectaron a la función pública, que incluían también la reducción de los 'moscosos' o ajustar el número de liberados sindicales.

Días después de la convalidación del decreto en el Congreso, la web www.thespanisheconomy.com --una página con el logotipo del Gobierno de España que proporciona información en inglés sobre la economía española y a la que se puede acceder desde diferentes webs oficiales, como la página del Ministerio de Economía y Competitividad-- publicaba un comunicado destinado a inversores y medios de comunicación extranjeros en el que se cifraba en 5.430 millones el ahorro por la paga extra de todos los empleados públicos del país, incluidos los autonómicos, locales y de las diputaciones.

Por otra parte, la memoria económica de ese decreto de medidas antidéficit de julio de 2012, donde se decidió suprimir la paga extra, calculaba una pérdida de recaudación por IRPF cercana a los 1.000 millones de euros por esta supresión de la paga de Navidad.