El mercado laboral se compone de ofertas que, en muchos casos, no llegan a ser visibles para demandantes de trabajo e interesados. Son las denominadas ofertas de empleo ocultas, un listado de opciones a las que muchos no llegan a acceder por estar fuera de un circuito, el del ´networking´, que cada día cobra más importancia.

Los expertos en ´cazar talento´ - los denominados headhunters - explican que cerca del 80% de las ofertas de empleo están ocultas, es decir, no se publicitan en medios tradicionales y tampoco aparecen en las páginas web de búsqueda de trabajo. ¿Cómo, entonces, se llega a ellas? ¿Qué vías utilizan las empresas para hacerse con los profesionales que necesitan?

Internet ha facilitado los métodos de envío de cartas de presentación y currículos, pero filtrarlos y seleccionarlos es un trabajo ingente que muchas compañías no realizan ya que prefieren recurrir a trabajadores de los que tengan referencias a través de sus propios contactos, trabajadores y directivos. Además, la confidencialidad es otro motivo fundamental por el que muchas compañías no hacen públicas sus ofertas: hacerlo podría dar pistas a la competencia sobre un proyecto estratégico.

Es aquí donde cobra una importancia determinante la red de contactos que se haya creado el trabajador durante sus años de experiencia. No sólo a través del contacto personal directo y cotidiano sino también a través de las redes sociales y los portales sectoriales: LinkedIn, Freelancer y Friendsandjob son las más específicas, además de las clásicas como Twitter y Facebook.

Así, ser activo en estos medios permitirá al trabajador mantener un hilo directo con personas que pueden informarle de una posible oferta, si bien la paciencia y el pensar a largo plazo se imponen como claves a manejarse, puesto que no siempre es sencillo y frecuente que surjan ofertas atractivas.

El director de Recursos Humanos de Jobandtalent, Ramón Egea, destaca que "lo más importante es tener una red de contactos del sector que te interesa, una agenda de personas con las que mantengas buena relación y en la que haya un beneficio mutuo". En este campo nadie sobra: antiguos compañeros del colegio y la universidad, ex compañeros de trabajo, profesores, conocidos de cursos de formación, profesionales del sector€

Cualquier lugar puede ser óptimo para hacer un contacto, aunque el paso clave llega después: es necesario, hablando en términos básicos, fomentar una relación actualizada para que él no se olvide de quiénes somos y nosotros tampoco nos olvidemos de su identidad. Cuidando todo estos aspectos, se puede llegar a estar en primera línea para acceder a una oferta de empleo oculta.

Por último, aparece el concepto de ´mercado diana´. Se trata, en líneas generales, de identificar las empresas a las que se gustaría pertenecer y enviarles una carta de presentación personalizada y distinta del curriculum tradicional: hay que enfocar los aspectos que dan valor al empleado y ofrecerlos a la empresa, haciéndole ver donde puede ser más brillante nuestro trabajo.