Naturgy registró un beneficio neto recurrente en el primer semestre de 532 millones de euros, un 22% más que en el mismo periodo del año anterior, según los resultados presentados este jueves por la compañía.
La compañía pagará el primer dividendo del Plan Estratégico 2018-2022 a cuenta del ejercicio 2018 de 0,28 euros por acción en efectivo el próximo 31 de julio, tan sólo cuatro semanas después de haber presentado la nueva hoja de ruta en Londres.
Según ha explicado Naturgy en una nota, "este primer dividendo a cuenta sigue las líneas establecidas por el nuevo Plan Estratégico 2018-2022 y es parte de un dividendo total de 1,3 euros por acción con cargo al ejercicio 2018, un 30% más que en 2017". A partir de este año 2018 la compañía se ha comprometido a aumentar un mínimo del 5% anual hasta alcanzar los 1,59 euros por acción en 2022.
El EBITDA recurrente aumentó también un 6% entre enero y junio hasta los 2.105 millones de euros. La evolución de los tipos de cambio en el semestre tuvo un impacto negativo de 106 millones en el EBITDA, "afectando a todas las divisas en las que opera la compañía energética".
Comportamiento estable del negocio
El resultado de la compañía ha estado marcado por un crecimiento de la actividad de la división Gas & Power, y por un estable comportamiento del negocio de distribución de gas y electricidad en los principales mercados.
La revisión del valor de los activos llevada a cabo como consecuencia de la actualización de las principales hipótesis y proyecciones de los negocios, ha conllevado un deterioro contable de 4.851 millones de euros, que impacta significativamente y de forma extraordinaria en la cuenta de pérdidas y ganancias consolidada del año.
"El Plan Estratégico busca reforzar la disciplina de inversión a través de unos umbrales de rentabilidad y que garanticen la creación de valor y un crecimiento rentable. Lo más relevante de nuestro plan estratégico es que primaremos la creación de valor sobre el tamaño", ha recordado Francisco Reynes.
Naturgy ha explicado al mercado que, en sintonía con el nuevo entorno macroeconómico, las perspectivas de los principales indicadores del sector energético y las hipótesis contempladas en el Plan, ha revisado el valor de sus activos, y ha realizado un ajuste contable y puntual por 4.851 millones de euros antes de impuestos.
Por otra parte, el Plan Estratégico recoge un programa de eficiencias que se pondrá en marcha en el segundo semestre. Por otro lado, se refuerza la disciplina de inversión, al exigirse unos umbrales de rentabilidad mínima a las inversiones que garantizan la creación de valor y el crecimiento rentable. En el semestre el 70% del capex invertido, se destinó a proyectos de crecimiento orgánico.
