La aerolínea irlandesa Ryanair informó este viernes de que concederá un "periodo de gracia" para que sus pasajeros "se acostumbren" a la nueva política de equipaje, que desde este jueves les obliga a pagar por llevar una maleta de mano en los aviones.

Su director de mercadotécnica, Kenny Jacobs, explicó a la cadena pública RTE que esta concesión continuará "durante los primeros días del mes de noviembre", con vistas a facilitar la transición hacia las nuevas normas.

Desde este jueves, la compañía líder en Europa del sector de bajo coste cobra un mínimo de entre seis u ocho euros por permitir llevar una maleta de mano, que hasta ahora era gratis, una medida que ha causado polémica.

En su primer día de aplicación, reconoció este viernes Jacobs, se formaron colas en algunos aeropuertos, como en el londinense de Stansted, donde los responsables de las puertas de embarque de Ryanair dejaron pasar a pasajeros con maletas de manos que no habían facturado, siguiendo las recomendaciones de la dirección de la aerolínea.

"Aunque nuestra nueva política ha entrado este jueves en vigor, hemos pedido a nuestros agentes de embarque que adopten una posición razonable mientras los clientes se acostumbran a las nuevas reglas", indicó el jueves Ryanair en un comunicado. En este sentido, Jacobs recordó este viernes que los pasajeros que no deseen pagar los nuevos suplementos solo podrán llevar consigo en la cabina del avión un bolso de mano, un maletín o una mochila pequeña.

Para poder llevar a bordo del aparato una maleta de mano de diez kilos y medidas estándar (55x40x20cm), además de la bolsa de mano, los clientes deberán seleccionar cuando hacen la reserva la opción de embarque prioritario, que cuesta seis euros.

La otra alternativa para viajar con una maleta de mano es pagar ocho euros cuando se hace la reserva, sin prioridad, del billete, si bien el pasajero deberá facturarla en los mostradores del aeropuerto y recogerla después en la cintas de equipaje en su lugar de destino.

Si no elige ninguna de esas opciones cuando compra el billete online, el cliente podrá hacerlo después -hasta 40 minutos antes de la hora de salida del vuelo-, pero le costará diez euros, mientras que si se presenta en el aeropuerto sin haber facturado en ninguno de esos casos, esa cantidad sube a los 25 euros.

Hasta este jueves todos los pasajeros sin prioridad podían llevar un bolso de mano y una maleta sin cargo adicional, aunque las maletas debían ser etiquetadas en la puerta del avión para posteriormente ser transportadas en la bodega de forma gratuita.