Atrás quedó la crisis que se llevó por delante cualquier iniciativa de construcción en España. Actualmente la rentabilidad del ladrillo está en auge, y este 2020 serán muchos los edificios e infraestructuras que se construyan por parte de las promotoras. Vamos a hacer un somero repaso a cuál es la situación de cara a 2020.

La inversión en el ladrillo

España es un país que ha pasado por diferentes fases en su inversión en el ladrillo, desde épocas doradas hasta momentos dolorosos. Hace ya 10 años desde que estallara la traumática burbuja inmobiliaria, la cual llevó a España a una profunda crisis económica y bancaria. Actualmente, la inversión en ladrillo se ha recuperado y ha ganado poco a poco su espacio en el mundo de la inversión. El sector inmobiliario es uno de los destinos favoritos por parte de los inversores para su dinero, y este 2020 la rentabilidad se sigue manteniendo.

Los estudios y datos muestran que este mercado sigue estando activo y que el sector de los inmuebles se encuentra en alza. Los precios se han ido moderando progresivamente hasta estabilizarse este año. Por lo tanto, los compradores de viviendas en 2017 son los que han obtenido mayores ganancias, habiendo adquirido inmuebles por precios muy bajos.

Este año que comienza seguirá habiendo lugar para las apuestas de rentabilidad en el sector inmobiliario, aunque cada vez serán más selectivas, teniendo en cuenta la localización y el tipo de activo. A pesar de la incierta situación del mercado financiero, se estima que el ciclo inmobiliario en el que se encuentra España se prolongará durante al menos dos o tres años más.

Sin embargo, las revalorizaciones serán más moderadas, y se podrá encontrar una marcada divergencia entre los segmentos prime y las localizaciones secundarias. El segmento prime es aquel que comprende las oficinas en grandes urbes como Madrid y Barcelona, los centros comerciales y viviendas situadas en el centro de las ciudades o en las mejores zonas de costa.

En marzo del 2019 el INE publicó que el precio medio de la vivienda había subido con respecto al año anterior un 6,6 %; se trata del mayor crecimiento desde 2007. Además, este fue el quinto ejercicio consecutivo de subidas. Por otro lado, la subida de precios de la vivienda nueva fue similar con respecto al 2018, del 6,2 %, lo que significaría que los precios están bastante estabilizados. Por lo tanto, las previsiones apuntan a que en 2020 se producirá un nuevo incremento de los precios, pero esta vez inferior.