Las criptomonedas están en boca de muchos. ¿La razón? El rally del precio del bitcoin, la más popular de todas ellas, que durante semanas ha marcado un máximo tras otro hasta superar ampliamente los 40.000 dólares, antes de volver a descender al entorno de los 35.000 dólares en los últimos días.

Desde el nivel de mediados de marzo de 2020, cuando llegó a bajar hasta los 4.900 dólares, la criptomoneda se ha revalorizado más del 800% y se está convirtiendo en un activo de moda.

"Desde programadores de datos y científicos de cadenas de bloques hasta fontaneros y peluqueros, bitcoin ha entusiasmado a gente de todos los ámbitos", asegura Yoni Assia, CEO y cofundador de la plataforma de inversión en multiactivos eToro.

En su entusiasmo, el nuevo inversor se topa con un complejo sistema basado en innovaciones tecnológicas. Bitcoin es la primera criptodivisa creada y nació como dinero alternativo en 2009, al calor de la gran crisis económica y financiera. Es un proyecto de código abierto y descentralizado, sobre una red de ordenadores P2P.

"No es para todos los públicos, tienes que tener nociones de tecnología e internet, porque si no, no vas a entender nada", plantea el profesor del Programa Especializado en Blockchain del IEB, Daniel Díez, que no recomienda el bitcoin para personas sin experiencia en inversión. "Deberías estar preparado para que haya bajadas profundas en la cotización, o subidas, y aun así mantenerlo y no tomar decisiones precipitadas. Esto a un amateur le va a costar", añade.

Activo refugio

Tampoco lo aconseja Juan Fernando Robles, profesor de banca en CEF-Udima, que lo considera un producto de "alto riesgo" solo apto para perfiles "muy agresivos". "El bitcoin es un refugio: ante la baja rentabilidad del mercado financiero, los tipos negativos, la mala situación de la economía, la presión fiscal de los estados€ la gente busca una salida. Estos activos, en momentos de crisis, suben como la espuma", explica.

El problema es que pueden bajar con una velocidad parecida: sin un banco central que los respalde y teniendo en cuenta que parte de la comunidad compra bitcoins para conservarlos y no para hacer trading, la liquidez y la escalabilidad -capacidad técnica de adaptarse a la mayor demanda- están limitadas. Y esto influye en la fluctuación. "Si el leitmotiv del bitcoin de complementar el sistema financiero actual se cumple, habrá una explosión en la valuación porque al final el bien es escaso y la demanda sería increíble. Si estás informado y crees en esa visión, tiene sentido invertir. Lo que para mi no es recomendable es invertir por el mero hecho de que ha subido", añade Daniel Díez.

Tecnología y volatilidad son dos barreras de acceso que desbloquea cada vez un mayor número de inversores: la última encuesta mensual que Bank of America realiza a los gestores de fondos revela que el bitcoin ha superado a las acciones de las compañías tecnológicas como activo más comercializado. Y su capitalización de mercado rebasa los 661,6 mil millones de dólares, lo que equivale al 9,2% del total de la capitalización del sector de la banca, según datos de CryptoParrot.

Del lado de los detractores, en los últimos días la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, lo ha calificado de "activo altamente especulativo" utilizado para el lavado de dinero, y reclama una regulación global de criptomonedas. A su vez, la autoridad financiera británica, la FCA, ha emitido una nota advirtiendo a los inversores que apuesten por este tipo de activos deben "estar preparados para perder todo su dinero", mientras que los analistas de Bank of America (BofA) han denominado al bitcoin "la madre de todas las burbujas".

Empezar con 1 euro

Para los convencidos en probar suerte, el docente de IEB establece el análisis como punto de partida: "Puedes empezar desde 1 euro; compra lo mínimo que necesites para saber cómo utilizarlo, cómo custodiarlo y experimentar". Existe la posibilidad de comprar fracciones de bitcoin, por lo que la aportación inicial no tiene por qué ser elevada. La unidad mínima del bitcoin es el 'satoshi' y su valor es la cienmillonésima parte de un bitcoin. Es decir, un bitcoin es divisible en 100.000.000 'satoshis'.

Por su parte, Raúl López, Country Manager en España de la plataforma de intercambio de criptomonedas Coinmotion, hace hincapié en la importancia de invertir una cantidad que permita "asumir pérdidas y no afecte a la economía general del inversor" y diversificar, de cara a minimizar las posibles impactos negativos.

Los expertos inciden en que, puestos a invertir en las más de 4.000 criptomonedas listadas en Coinmarketcap, mejor empezar por el bitcoin por ser la más antigua, estable y segura. "Te permite analizar con más profundidad la evolución de su precio a lo largo de los años. Otra razón es que hay mucha información sobre ella", apunta López, que matiza que la sobreinformación acumulada puede hacer difícil "encontrar contenido de fuentes fiables".

La fiabilidad debe ser el objetivo también al elegir la forma de operar, ya sea por cuenta del propio inversor, a través de una plataforma de intercambio o exchange, o con un intermediario. "Cuando visites la web de la empresa o empresas que estés analizando, lo primero que tienes que hacer es encontrar qué organismo le ha otorgado la licencia. Y después, visitar la web oficial de ese organismo y buscar si dicha empresa está o no registrada en su base de datos", detalla.

Es decir, habrá que fijarse en que esté regulada oficialmente y tenga una licencia dentro del Espacio Económico Europeo, para contar con el amparo de las leyes europeas. "Si ves algo raro, no puedes saber quién está en el equipo, quién ha invertido€ Lo mejor es alejarse", afirma Daniel Díez.

En su lista de plataformas seguras están Onyze, BitStamp, BitPanda, Binance o Bit2me. Y en su visión de futuro, el bitcoin ha venido "indudablemente" para quedarse. Solo el tiempo lo dirá.