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Los trabajadores del Sabadell van a la huelga este miércoles en protesta contra el ERE

Además, hay otra jornada de huelga el próximo viernes, 8 de octubre y habrá concentraciones ambos días de 11.00 a 13.00 horas

Concentración de trabajadores de Banco Sabadell en Sabadell.

Concentración de trabajadores de Banco Sabadell en Sabadell. / UGT BANCO SABADELL

EP

Los sindicatos presentes en la mesa de negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado en Banco Sabadell han convocado este miércoles una huelga general para protestar contra del proceso iniciado por la dirección de la entidad y que contempla por el momento la salida de 1.730 empleados.

En concreto, la huelga está convocada en A Coruña, Alicante, Almería, Barcelona, Bilbao, Castellón, Ibiza, Las Palmas, León, Madrid, Málaga, Murcia, Oviedo, Palma, Pamplona, San Sebastián, Valencia, Valladolid y Zaragoza.

Además, hay otra jornada de huelga el próximo viernes, 8 de octubre, en Alicante, Almería, Barcelona, Bilbao, Castellón, Gijón, Ibiza, León, Madrid, Murcia, Pamplona, Sabadell, San Sebastián, Santiago de Compostela, Santa Cruz de Tenerife y Valencia.

La representación sindical también ha llamado a los trabajadores a realizar una concentración, tanto este miércoles como el viernes, de 11.00 a 13.00 horas, ante el Edificio Torre Sabadell en Barcelona.

Tanto CCOO como la plataforma de unión sindical que engloba a UGT, Federación SIBS Sicam-Aprobas, Alta Sindicato, Cuadros GBS e Intersindical, han convocado a los trabajadores a secundar ambos días de huelga.

En concreto, la plataforma sindical ha hecho un "llamamiento masivo" como "medida de presión" a fin de evitar el ERE en la entidad, y no ha descartado que se amplíe el calendario de movilizaciones.

Propuesta del banco

En su última propuesta, Banco Sabadell rebajaba en 206 las salidas contempladas en el ERE planteado, pasando de 1.936 a 1.730 afectados. En concreto, 1.450 salidas se producirían en la red de oficinas, de ellas, 1.025 serían puestos administrativos y 425, gestores, 35 en las direcciones territoriales y 245 en servicios centrales.

Además, el banco mejoraba algunas de sus propuestas, al incluir en los colectivos que puedan adherirse a las medidas a todo el personal comercial de la entidad, al tiempo que se mostraba favorable a incluir un cupo máximo de 50 personas, si fuera necesario en algún territorio, de personas de entre 50 y 55 años.

La dirección de Sabadell también mejoraba su propuesta de prejubilaciones para aquellos trabajadores con, al menos, 15 años de antigüedad. El colectivo de trabajadores mayores de 58 años, y hasta los 62 años, contaría con una prejubilación del 57% del salario anual -frente al 55% propuesto anteriormente por la entidad-, mientras que los empleados que se prejubilen con entre 56 y 57 años tendrán una prejubilación del 55% del salario -frente al 50% anterior-, con un tope de 270.000 euros y descontando paro y subsidios que se pudieran solicitar.

Para los menores de 50 años y mayores de 56 años con menos de 15 años de antigüedad, ha propuesto bajas incentivadas de 30 días de salario, hasta un máximo de 20 mensualidades, a lo que se sumaría 2.000 euros por trienio completo. Anteriormente, la entidad contemplaba una indemnización de 27 días por año trabajado, hasta un máximo de 18 mensualidades.

Por último, la entidad aceptaba la movilidad funcional. En concreto, ante la salida permitida de gestores especializados, podrán promocionar gestores básicos o administrativos.

Rechazo de los sindicatos

En la reunión celebrada en el día de ayer, sin embargo, la representación legal de los trabajadores, incluyendo a los sindicatos CCOO y UGT, seguía reclamando a la dirección de Banco Sabadell que aplicase la voluntariedad en el ERE.

Además, CCOO continuaba insistiendo en reducir el número de afectados en el proceso, mientras que la plataforma sindical en el que se incluye a UGT señalaba que la propuesta por escrito que Sabadell hizo llegar a los sinidatos plantearían "condiciones inaceptables" sobre forzosidad y movilidad geográfica que "suponen una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, algo que de partida el banco no había reconocido, incluso negándolo en intervenciones a lo largo de las sesiones pasadas y que ahora pone encima de la mesa".