La comisión de eurodiputados centra su foco en la agricultura intensiva del Mar Menor

Ruta por el Mar Menor este viernes por parte de los eurodiputados miembros de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo. Desde bien temprano, los integrantes de este órgano de inspección que ha atendido las peticiones de varios colectivos locales para visitar la laguna salada han podido comprobar el nivel de degradación que sufre el ecosistema. 

La visita se ha iniciado a los pies de playa, en concreto en la de Los Alemanes, en La Manga, donde los comisarios se han encontrado una playa lisa y limpia. Esto ha suscitado la protesta de varios de los eurodiputados españoles que acompañaban a la comisión y también de los colectivos aunados en la plataforma SOS Mar Menor, que han denunciado un intento de ocultar la descomposición de algas que se acumula en las orillas de esta zona.

El director de ANSE, Pedro García, se ha encargado de mostrar los fangos generados tras la primera capa superficial de arena, todo esto bajo la atenta mirada de la presidenta de la comisión, Tatjana Zdanoka. Incluso los propios operarios encargados de retirar la biomasa acumulada en la orilla seguían trabajando a primera hora de la mañana, rastrillando también fangos para meterlos en un contenedor. La jefa de la delegación europea definía ayer como una "situación de contaminación catastrófica" la que ha sufrido la albufera.

La visita continuaba por las salinas de Marchamalo y tenía su punto álgido en la desembocadura del Albujón, donde tanto Ecologistas en Acción, ANSE o Pacto por el Mar Menor por un lado, y el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Antonio Luengo, trataban de explicar desde distintas posiciones el problema del caudal de agua con nitratos que discurre por este punto.

En mitad de estas explicaciones el eurodiputado de Vox, Jorge Buxadé, y el director de ANSE han tenido un encontronazo por las diferencias en cuanto a la responsabilidad de la agricultura en el estado de la laguna. Buxadé reclamaba que se dejara de criminalizar a los agricultores y defendía el modelo intensivo del sector en la cuenca vertiente, mientras que Pedro García le dejaba claro que no lograría enfrentarles a los agricultores.

Los peticionarios, que han acompañado a la comisión en todo momento, han denunciado las presiones de algunos participantes en la visita para que los europarlamentarios no bajaran del autobús para visitar la playa de Los Nietos, zona de conflicto por la abundante acumulación de algas en descomposición a varios metros de la orilla. Sin embargo, el tour sí ha pasado por las playas de Los Alcázares, donde también constataron, denuncian, que se había limpiado horas antes de la visita institucional.

Cumbre científica en el NH Amistad

De vuelta a la capital, los eurodiputados han comenzado otra ronda de consultas como ya hicieron ayer, con una primera cita con los científicos que han trabajado durante años en el Mar Menor. Aquí se han mostrado dos posiciones enfrentadas pero las cuestiones de los comisionarios iban centradas en conocer la responsabilidad de la agricultura en la degradación de la laguna a un nivel técnico y científico.

Tenían muy claro lo que querían preguntar, señalaban fuentes presentes en la reunión. Los eurodiputados tratan de realizar un análisis más profundo sobre la compatibilidad de la agricultura en la cuenca del Mar Menor con la laguna salada. En cuanto al origen del problema, la división ha sido palpable: mientras el catedrático de Ecología de la UMU, Ángel Pérez Ruzafa, ponía el acento en el elevado nivel freático del acuífero y las descargas de agua con nitratos que producía, otros científicos como Juan Manuel Ruiz del Instituto Español de Oceanografía, Francisca Giménez de la Universidad de Alicante o Gonzalo González Barberá del Cebas apuntaban a la entrada excesiva de nutrientes originada por vertidos agrícolas en la cuenca.

El tema de las competencias ha vuelto a salir a debate entre los integrantes de la comisión y los invitados a la reunión, en concreto con los colectivos en defensa de la laguna que se han reunido más tarde con los eurodiputados. Estos mismos han dejado claro que la mayoría de las competencias sobre el ecosistema y la comarca del Campo de Cartagena corresponden al Gobierno regional.

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