SALIDA DE ESPAÑA

Ferrovial no trasladará su sede a Países Bajos si se opone el 2,57% de los accionistas

La compañía se ha comprometido a pagar 26 por acción a los accionistas que no apoyen la decisión, pero ha dotado únicamente 500 millones para esto, que solo le permitiría adquirir el 2,57% del capital | La familia Del Pino controla más de un tercio de Ferrovial, el 35,29%, según la CNMV

Sede corporativa de Ferrovial en Madrid.

Sede corporativa de Ferrovial en Madrid.

Juan Carlos Lozano | Gabriel Santamarina

El voto en contra de solo el 2,57% del capital social de Ferrovial tumbaría el traslado de la sede social de la compañía a Países Bajos y pondría punto y aparte a una operación que sacude el mundo empresarial y político español. Según consta en las condiciones establecidas por el propio consejo de administración de Ferrovial para autorizar la absorción de Ferrovial S.A. por parte de Ferrovial Internacional (FISE), filial al 100% de la compañía radicada en Países Bajos, la fusión se condiciona a “que la obligación económica de Ferrovial […] no exceda de 500 millones de euros”.

Los 500 millones a los que se refiere el documento suponen el 2,57% del valor en bolsa de la compañía. Ferrovial se comprometió a pagar 26,7 euros por título a los accionistas que decidan rechazar la absorción, cuando la compañía cerró el jueves en bolsa a un precio de 26,73 euros por acción. Esto quiere decir que, si algún accionista vota en contra de la decisión y acepta el pago comprometido, estaría perdiendo parte del dinero que podría obtener con una venta directa a mercado.

Además, la operación también está condicionada a que los consejos de Ferrovial y de Ferrovial Internacional (FISE), que es la absorbente, “tengan certeza razonable de que las acciones de FISE serán admitidas a negociación en Euronext Ámsterdam y en las bolsas de valores españolas”. La autorización o rechazo definitivo a la operación de fusión-absorción deberá ser ratificada por la Junta General de Accionistas de Ferrovial, que no tiene fecha y se convocará “a su debido tiempo”, según la empresa.

¿Quiénes son los grandes accionistas?

La siguiente cuestión es hasta qué punto es factible que un 2,57% del capital rechace la fusión-absorción y, por tanto, tumbe la operación. Actualmente, el free float de la compañía supera el 60%, mientras que los principales accionistas forman parta de una saga familiar encabezada por el actual presidente, Rafael del Pino, con el 20,4%, y sus hermanos María (8,2%), Leopoldo (4,15%) y Joaquín (2,54%). Entre los cuatro suman más de un tercio de la empresa, concretamente el 35,29%, según el registro de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

En la lista de grandes partícipes figura The Children's Investment Fund Management, que cuenta con un 6,41%, y su fundador, Chris Hohn, con un 6,01%. Representantes de este vehículo explicaron a Expansión que "el plan de Ferrovial es una gran idea" y lo apoyan al 100%, además de afirmar que este movimiento no lo realizan por motivos fiscales, sino por cotizar en Estados Unidos. Completan el accionariado la mayor gestora de fondos del mundo, Blackrock, con un 3,17%, y Lazard Asset Management, con un 3,08%.

Los siguientes por orden de participación cuentan con menos de un 3%, pero siguen siendo decisivos en la Junta de Accionistas: Norges Bank (2,96%), la gestora de fondos de pensiones Capital Group Companies (2,93%), Southeastern Asset Management (2,9%), un fondo de pensiones de New Jersey (2,74%), UBS (2,4%), Banco Santander (1,44%) y Fidelity (0,99%). El no de uno o varios de estos pondría entre las cuerdas los planes de la familia Del Pino.

¿Qué opinan las agencias de calificación sobre la decisión?

El último informe de una de las mayores agencias de calificación del mundo, Standard & Poor's, al que ha tenido acceso ACTIVOS, el suplemento económico de Prensa Ibérica, y EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, del grupo Prensa Ibérica, lanza varias advertencias sobre este movimiento. La primera, S&P cree que "parte de las acciones recompradas podría utilizarse para la remuneración de los accionistas, limitando potencialmente las salidas de efectivo", a través del reparto de scrip dividends (entrega de dividendos en forma de acciones). Esto no sería nada extraordinario, ya que Ferrovial en 2020 y 2021 remuneró a sus accionistas de esta forma.

La agencia de calificación también señala que, aunque la decisión de recomprar hasta 500 millones de euros en acciones no debe afectar a las métricas de la empresa, podría reportar "una posición de deuda neta en 2023, antes de volver a una posición de caja neta en los años siguientes". En cualquier caso, afirman que, si no se rellena el cupo, reeditarán sus previsiones. Además, destacan que hay una alta probabilidad de que Ferrovial recompre un bono híbrido que tiene de 500 millones de euros si culmina su traslado a Países Bajos.