El automóvil español generó un superávit comercial de 16.457 millones de euros en 2022

El año pasado, la industria del automóvil generó un superávit comercial de 16.457 millones de euros. Esta diferencia positiva entre los vehículos vendidos a otros países y los importados supone el mayor aporte a la actividad comercial española. No obstante, según los datos aportados por la patronal Anfac, la aportación de 2022 fue un 13,3% más baja respecto a 2021 en consecuencia del incremento del valor de las importaciones, de un 22,8%, en comparación con la ligera subida del valor de las exportaciones, del 2,8%.

Anfac celebra que el automóvil siga siendo el principal aportador a la balanza comercial del país porque recuerda que 2022 fue un año muy complicado para las fábricas locales por la crisis de los chips y la incertidumbre económica derivada de la inflación y el encarecimiento de las materias primas y la guerra de Ucrania. Los problemas logísticos tampoco ayudaron a la industria. Según las cifras aportadas en enero por la patronal, una buena racha desde agosto permitió a las fábricas españolas cerrar 2022 produciendo un 5,8% más respecto a 2021 con 2,2 millones de vehículos, aunque la cifra sigue por debajo de los niveles prepandemia.

De esos 2,2 millones de unidades fabricadas en España, un total de 1,88 millones salieron de nuestras fronteras en destino a otros mercados, un 3,3% más. Los principales importadores de coches españoles son mercados europeos como Alemania, Francia el Reino Unido y Turquía. En total, casi nueve de cada 10 vehículos españoles exportados acaban en algún mercado de Europa. En cuanto a las importaciones, Alemania, Francia y la República Checa son los principales proveedores de coches al mercado español.

El sector deja un superávit total de 9.497 millones

En total, las exportaciones de vehículos crecieron hasta un valor de 35.164 millones de euros, un 2,8% más, una subida tímida, pero en consonancia con la mejora de la producción nacional antes mencionada. Por el contrario, mucho mayor fue el incremento del valor de las importaciones, que ascendió un 22,8% hasta los 18.706 millones de euros respecto a 2021.

Según lo aportado por Anfac, contando también la industria de componentes, la automoción en general dejó en 2022 un saldo positivo a la balanza comercial de 9.497 millones de euros, un 27,6% menos respecto a 2021. Sumando las distintas actividades comerciales derivadas del sector, las exportaciones alcanzaron los 46.018 millones de euros, mientras que las importaciones subieron hasta los 36.521 millones de euros.

Pese a las dificultades vividas por la industria en 2022, el motor español, el segundo productor europeo y uno de los principales fabricantes del mundo, sigue siendo vital para la economía española. José López-Tafall, director general de Anfac, afirma que estas cifras “demuestran que la automoción en su conjunto mantiene su alto valor como motor económico para este país, representando el 10% del PIB y dos millones de empleos”. “Es vital que aseguremos el futuro de este sector y su posición en la transformación hacia la industria de la movilidad”, acaba.