Formación

«Este curso incorporamos dos grados pioneros en su ámbito»

«El de Ciberseguridad e Inteligencia Artificial y el de Estudios Transculturales Europeos responden a la estrategia de nuestra institución de adaptación a las demandas de nuestro entorno»

Ernesto Pimentel, vicerrector de Estudios de la UMA | L.O. / LA OPINIÓN. MÁLAGA

La Opinión

Málaga 27 MAY 2023 7:01 Actualizada 29 MAY 2023 10:02

Ernesto Pimentel da un amplio repaso por la oferta formativa de la universidad malagueña para el próximo curso 2023-24.

¿Cuáles son las novedades en grados en la oferta de la UMA del curso 23-24?

La oferta de estudios de grado en la Universidad de Málaga ha experimentado cambios relevantes, tanto por la incorporación de nueva oferta formativa, como por las modificaciones sustanciales que se han aprobado en el Consejo de Gobierno para los planes de estudios de un buen número de enseñanzas de grado. Comenzando con los nuevos títulos, destacamos el Grado en Ciberseguridad e Inteligencia Artificial y el Grado en Estudios Transculturales Europeos: Lenguas, Culturas e Interacciones. En ambos casos, se trata de grados pioneros en su ámbito. El primero de ellos combina dos campos de enorme trascendencia para el futuro del sector tecnológico y para la sociedad en general, como son la ciberseguridad y la inteligencia artificial. El segundo, un título conjunto con las universidades de Flensburgo (Alemania) y Estrasburgo (Francia), será el primer grado acreditado según el procedimiento específico establecido para el Espacio Europeo de Educación Superior (European Approach) y ofrecerá una formación interdisciplinar que abarca los ámbitos de la lingüística y las ciencias del lenguaje, la cultura, la literatura, y los medios de comunicación. Estos dos títulos vienen a reforzar la oferta de la Universidad de Málaga en los ámbitos de las humanidades y la tecnología, para complementar el catálogo de enseñanzas con el que la institución apuesta por una estrategia de actualización y adaptación permanente de la oferta a las demandas de nuestro entorno social, económico, cultural y medioambiental.Además de esta nueva oferta, otros grados han experimentado modificaciones de envergadura que persiguen adecuar la oferta de la Universidad a la lógica evolución de las disciplinas y del entorno, por lo que se han actualizado los contenidos y metodologías, así como algunas de las competencias y resultados de los procesos de formación y aprendizaje. De este modo, por ejemplo, grados en el ámbito de la filosofía, de la salud, de la telecomunicación o de la informática, se ofertarán con cambios sustanciales en sus planes de estudio.La oferta de la Universidad de Málaga aumentará también con la propuesta de cuatro nuevos dobles grados que permitirán la formación simultánea en dos ámbitos disciplinares. Esto significa que se ofertarán itinerarios específicos para cursar simultáneamente: el Grado en Psicología y el Grado en Logopedia; el Grado en Turismo y el Grado en Publicidad y Relaciones Públicas; el Grado en Geografía y Planificación del Territorio y el Grado en Historia; y el Grado en Derecho y el Grado en Criminología. En todos los casos, se persigue reforzar y facilitar la formación del estudiantado en disciplinas complementarias que mejoraran su capacidad de respuesta a las demandas del mercado laboral.

¿Y en másteres?

La oferta de posgrado también se verá incrementada el próximo curso mediante la propuesta de un nuevo Máster Interuniversitario en Tecnología Educativa, en el que la Universidad de Málaga colabora con la Universidad Internacional de Andalucía. Además, la Universidad de Málaga se incorpora al grupo de universidades que desarrollan el Máster Interuniversitario en Investigación y Análisis del Flamenco, uniéndose así a las universidades de Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva y Pablo de Olavide. Adicionalmente, otra de las novedades más destacables será el nuevo Máster en Abogacía y Procura, que sustituirá al actual Máster en Abogacía.Por último, en la oferta de posgrado también se ha producido una actualización generalizada de los planes de estudio de muchos másteres, atendiendo a diversas circunstancias, la mayor parte de ellas relacionadas con la adecuación a las necesidades de la demanda, lo que ha llevado a cambios en los objetivos, la estructura, los contenidos y las metodologías propuestas.

El binomio UMA-tejido productivo malagueño, tan íntimamente ligado desde siempre, ¿qué novedades nos ofrece en materia de prácticas, convenios con empresas u otras formas de vinculación?

Efectivamente, la conexión de la UMA con el tejido productivo de la provincia siempre ha sido considerada una cuestión estratégica para la institución y el objetivo es fortalecer nuestro posicionamiento aún más si cabe. Actualmente, la UMA tiene firmado más de 3.400 convenios con empresas y organizaciones para la realización de prácticas externas del alumnado, tanto curriculares (incluidas como parte integral del plan de estudios) como extracurriculares (que los estudiantes realizan de forma voluntaria, no como parte de su plan de estudios). Estas prácticas suponen un claro valor añadido extraordinario para la formación de las personas que acuden a la universidad a formarse, constituyendo, además, un valioso puente entre la universidad y el tejido económico y social, porque no hay que olvidar que las prácticas se realizan tanto en empresas, como en otros tipos de organizaciones sin ánimo de lucro y también en administraciones públicas. La propuesta de cotización de los estudiantes en prácticas sigue generando dudas en las universidades andaluzas por las graves consecuencias que esta medida puede tener desde el punto de vista de sus costes y de su gestión administrativa Así es, todas las universidades se han visto sorprendidas por la inclusión de la obligación de cotizar a la seguridad social por las prácticas curriculares en el Real Decreto sobre la ampliación de derechos de los pensionistas. Esto es sin duda una mala noticia por múltiples cuestiones, ya que va a generar un coste adicional y una carga administrativa, pero sobre todo, es especialmente preocupante por el escaso plazo de tiempo que se establece para su implementación. Desde la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y desde la Asociación de Universidades Públicas Andaluzas (AUPA), así como desde las propias universidades, se está en permanente contacto con los ministerios y con las consejerías competentes, y también con los colectivos empresariales y sociales que colaboran en la oferta de prácticas, para encontrar la mejor forma de abordar este cambio normativo.

¿Por dónde pasan las claves en un futuro cercano de una universidad pública como la UMA? Esas claves ¿trascenderán a la propia formación que imparte y potenciarán más su compromiso social?

Una universidad pública como la Universidad de Málaga tiene que estar imbricada en la sociedad. Esto es muy importante y tiene que ver con la función que se le encomienda, que mantenga lazos y relación con el entorno que la rodea para contribuir a una sociedad más sostenible que persigue la mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos y aspira al bien común. Esto significa que las claves del futuro cercano de la Universidad de Málaga pasan por entender los nuevos retos que se van a producir en ese futuro inmediato y que, con toda seguridad, deberán contemplar desafíos que se nos presentan para diseñar e implementar medidas que permitan el progreso social, el equilibrio medioambiental y el crecimiento económico. Entre ellos, por ejemplo, la retos que plantea la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), los retos tecnológicos (como la inteligencia artificial y su aplicación a todos los ámbitos de nuestra actividad), o las nuevas necesidades sociales y culturales de la población.