Poder atender a una amplia variedad de clientes es una prioridad para el Grupo Antequera Golf. Por eso, ofrecen una completa propuesta gastronómica en la localidad antequerana. Así, el grupo dispone de diversos restaurantes y espacios repartidos en diferentes enclaves únicos. El Hotel Antequera, el Hotel Convento La Magdalena y el restaurante del Campo de Golf de Antequera. En estas ubicaciones celebran bodas, primeras comuniones, bautizos, reuniones profesionales, comidas navideñas, reuniones familiares, de amigos o incentivos de empresa. Desde que se creara el resort, hace ya 17 años, la empresa y su concepto han evolucionado hacia la especialización en eventos, logrando formar un equipo de profesionales que acompañan durante todo el proceso de creación del mismo.

Además, sus eventos no sólo destacan por el trato personal sino por el sello de calidad de su cocina. Creaciones gastronómicas que cuidan las presentaciones, siendo uno de sus puntos fuertes el servicio de copas de bienvenida en espacios al aire libre, con propuestas como el ceviche de corvina con bloody mary, la porra antequerana con tomate ecológico o el tartar de atún de rojo.

Al frente de la oferta gastronómica del resort turístico antequerano está David Muñoz. Un chef ejecutivo que ha pasado por fogones de los restaurantes más prestigiosos del panorama nacional. Él es el creador del concepto gastronómico del grupo. Y si bien es cierto que el hilo conductor gastronómico de las distintas zonas de restauración es la calidad del producto, cada espacio tiene su propia identidad.

Restaurante de cinco estrellas

La joya gastronómica del resort se encuentra en el establecimiento hotelero de cinco estrellas, el Convento La Magdalena. Se trata de un antiguo convento de San Pedro de Alcántara del XVI rescatado con sumo cuidado por arquitectos e historiadores especialistas. Dicho edificio alberga el restaurante Refectorio, que se define por tener más de 500 años de historia; entre sus muros comían los monjes alcantarinos. Cuenta además con unas impresionantes vistas al paraje natural de El Torcal, Patrimonio de la Humanidad, gracias a la pared acristalada.

Aquí se fusiona la cocina tradicional y de autor con una cuidada técnica y puntos de cocción óptimos para no alterar las propiedades de los productos. Una cocina a baja temperatura en roner es la base que David Muñoz aprendió en su paso por el Celler de Can Roca y la emblemática Le Cordon Bleu, y que pudo poner en práctica en el Hotel Ritz de Madrid. Base que constituye la premisa sobre la que giran sus creaciones: respeto por el producto. Un ejemplo es la presa en manteca colorá a baja temperatura, con migas de pastor y huevo de codorniz.

Desde el Refectorio se trabaja con ingredientes de temporada, siendo especialistas en jornadas gastronómicas y menús con productos y recetas de estación. Actualmente se ofrecen creaciones de caza y setas, con propuestas tan interesantes como el paté de hígado de pichón; el foie de pato o la carne de ciervo y trompetas de la muerte. Se trata de un menú degustación que se completa con productos como la trufa tuber magnatum o tuber melanosporum. A estas jornadas habría que añadir otras de menús degustación que se celebran anualmente como ‘Locura de Dos’, ‘El menú del monje’ o ‘Tiempo de cuaresma’.

Otra de las peculiaridades de este restaurante de cinco estrellas es que se autoabastece de sus propios huertos y gallinas ponedoras. Además de la huerta en las lindes del hotel, las habitaciones, antiguas celdas de los monjes, disponen de huertos individuales como era habitual en la época. Tradición que han respetado y conservado, siendo los propios cocineros los que recolectan las verduras que irán en el menú.

Golf, arroces y carnes a la leña

El restaurante del Campo de Golf de Antequera está rodeado de 500.000 metros de césped natural y 16 lagos. Es singular, por ser ecológico, estar rodeado de especies protegidas y vistas a la Peña de los Enamorados. El olor a horno de leña envuelve todo el año al campo de golf pues en este espacio gastronómico, abierto a todo el mundo, sirven carnes, pescados y arroces a la leña.

Las opciones para disfrutar de las brasas son dos. Por un lado, el menú ‘Tiempo de Horno de Leña’, perfecto para los amantes de la carne y el pescado. Por 24 euros se puede tomar un paté de perdiz, una ensalada de codorniz en escabeche, un revuelto de setas y cardos y un plato principal que va desde el cochinillo asado, hasta chuletón de buey, lechazo o pescado de lonja.

De otro, está el ‘Menú del arroz’. Hay cinco variedades de caldoso y dos secos más la fideuá. Por 19 euros, el comensal tiene un arroz de rape y langostinos a la hierbabuena; caldero murciano; negro de sepia, gambas y ajetes con ali oli o fideuá de rape y gambones. Otros platos de cuchara que se terminan en el horno de leña son la fabada o el potaje de hinojos.

Pese a que la oferta es amplísima, el Grupo Antequera Golf no para de innovar, sacando recientemente otra línea gastronómica de catering. Bajo el lema de ‘En tu casa o en la mía’, las cocinas de este resort se mueven según las necesidades del cliente. Una opción para eventos familiares y de empresa.