Uno de los propósitos de la gala era premiar a la industria agroalimentaria por significar, no sólo una parte importante de la gastronomía de la provincia de Málaga, sino también por ser un motor fundamental para la economía en las zonas rurales, sirviendo a veces, como principal sustento de trabajo para muchos municipios.

Por ello, La Opinión de Málaga decidió que la empresa Icarben, ubicada en Benaoján, fuera la galardonada con el Premio Sabor a Málaga. «Estamos muy orgullosos de este premio, no sólo porque reconoce nuestros 40 años de trayectoria sino también a la industria a la que pertenecemos. Además, queremos dar las gracias a la alcaldesa de nuestro municipio, Soraya García, por todo su apoyo sobre todo cuando se generó aquella crisis alimentaria», comentó José Antonio Ortiz, adjunto a la dirección.

Esta empresa fundada por José Castaño Medina lleva cuatro décadas fabricando zurrapas, patés y una gama de untables y cremas. Tiene venta directa y también una gama para hostelería.

Actualmente, elabora una línea de asados que incluye paleta y lomo asados; lomo de orza, lomo en manteca; carne mechá y chicharrones, así como todos los productos típicos de la zona como son callos y morcilla.

En los últimos tiempos, Icarben ha apostado por una nueva línea de productos que ya está empezando a comercializarse que son de quinta gama o los 'ya listos para comer'. Con la incorporación a la familia de estos nuevos productos Icarben, deja de ser una fábrica de embutidos para ser una fábrica de alimentación. Un salto cualitativo para esta empresa de sello familiar. En esta serie se engloban los platos tradicionales como el codillo, los lomos asados, los callos con chorizo y los garbanzos y morcilla.