En Navidad el final de cada comida cobra una importancia emblemática. Es el broche que culmina gastronómicamente nuestra forma de celebrar estos días festivos. En cada mesa es habitual que tartas, mousses, púdines, troncos de Navidad o panettones se mezclen con la tradicional dulcería navideña de mantecados, polvorones, mazapanes y los turrones. Así, muchas pastelerías de Málaga en estas fechas se afanan en conseguir un catálogo en el que convivan recetas clásicas con otras vanguardistas para atraer al mayor número de público a su local, respetando calidad y costumbre.

La Pastelería Ramos de Vélez Málaga tiene por bandera su tierra, lo que lleva a los primos Sebastián Guerrero y Damián Ramos a trabajar con productos de km0. Y eso se traduce en su gama de tabletas y lingotes de turrones más innovadores como de torta de Algarrobo; vino de Málaga y pasas; mango; zumbral y jazmín; rulo de queso de cabra, P.X y nueces pacanas ecológicas o el nuevo de lima y aguacate. A estas propuestas se unen los clásicos polvorones, mantecados, bombones y panettones. En su web se pueden hacer pedidos de productos o escoger uno de sus lotes.

En Ronda la Confitería Daver de David Verdú tiene un apartado sólo de dulces navideños. Ahí encontramos sus afamados troncos de Navidad, cuyo sello de la casa son las placas de chocolate en sus extremos. Se puede elegir el ´Masini' a base de bizcocho de almendras con yema tostada relleno de trufa y nata o el ´Ópera' con bizcocho de frutos secos con ganache de chocolate relleno de crema de café, entre otros. En cuanto a turrones artesanos los sabores clásicos triunfan: nata con nueces; crema tostada; praliné de pistachos, pipas caramelizadas, nueces de macadamia o almendras; frutos secos o trufa al güisqui. Disponen de varios formatos: barra, tableta, barritas o minis estuchados. También elaboran hojaldrinas y panellets con piñones castellanos. El catálogo en su web es amplísimo.

En este rápido periplo por la geografía malagueña hay que detenerse en el Obrador San Pancracio de Antequera. Elaboran artesanalmente piezas que conservan la esencia más pura del tradicional mantecado. Doble de Aove con almendras, bocaditos de avellana o la última creación: mantecado gourmet. Destacable también, su turrón a la piedra. tienen tienda virtual.

En la capital, Ñandutí, Dora Ortíz hace una repostería muy personal. Este año ha innovado con los troncos de Navidad: base de bizcocho de vainilla, mousse de fruta de la pasión y núcleo de mango; brownie, mousse de chocolate extra bitter 62% o de bizcocho de calabaza y chocolate relleno de crema de turrón. Novedosos son también sus turrones de sabores como ganache de mango, crujiente de nuez pacana y chocolate inspiración frambuesa; chocolate negro Guanaja 75% y especuloos; cheesecake con chocolate inspiración fresa o chocolate dulcey, praliné de almendra, coco y orujo. También son destacables sus panettones.