Perro Viejo Málaga: comida como en casa

Grupo Perro Viejo nace en 2011 con el Bar Antojo (Sevilla). Una aventura empresarial y familiar que siempre ha tenido un objetivo claro: hacer sentir a sus clientes como en casa. Una mesa, un lugar donde compartir momentos a través de la experiencia gastronómica. Algo lleno de vida, aspirando siempre a más. Este afán de crecimiento los lleva a abrir más locales en la capital andaluza pero también en la vecina Málaga: 2012 La Niña Bonita (Sevilla); 2013 Pez Tomillo (Málaga); 2014 Perro Viejo Tapas Bar (Sevilla); 2015 Perro Chiko (Sevilla); 2017 Seis Tapas Bar (Sevilla), para desembarcar en este 2022 con el Perro Viejo Tapas en el centro de Málaga.

Grupo Perro Viejo es una empresa joven dinámica, guiada por la pasión en lo que hacen y la máxima calidad humana y profesional.

Perro Viejo Málaga abrió sus puertas el día 11 de mayo de 2022 (calle Mártires 15, en pleno centro de la ciudad. Abierto todos los días de 13 a 16 horas y de 20 a 00 horas). Un proyecto cuidado donde confluyen arquitectura, decoración y gastronomía... Un espacio espectacular, un edificio reformado de tres plantas cuya cuidada decoración está ejecutada con revestimiento de ladrillo, suelos de madera y terrazo, iluminación sutil para destacar rincones y deleitarte con el contexto de la misma. Un lugar privilegiado con una comida de diez.

Pero como todo no es arquitectura y hay que alimentar al cuerpo, la carta de Perro Viejo contempla tapas, arroces, pasta, pescados y carne… Platos elaborados con mimo, no muy numerosos pero sí muy significativos emplatados con gusto y con un sabor exquisito. Si empezamos con las tapas es obligado pedir la tosta mexicana con salpicón de pulpo, aguacate y camarones, las mini hamburguesas de buey, queso brie, alioli de mostaza verde y hierbas y cebolla caramelizada o las gyozas de pollo japo mexicano. En cuanto a los arroces, sorprende y mucho el que tiene secreto ibérico con setas de temporada.

Destacables son sus carnes donde manda el entrecote de buey madurado con puré trufado y verduras del huerto. Los pescados no se quedan atrás. Pocos pero muy bien avenidos y si no que se lo digan a las sardinas marinadas con portobellos, dashi y crujiente de parmesano, por un lado, y al ceviche de atún inspirado en un viaje a Filipinas con leche de tigre de mandarina, por otro.

Maridar los diferentes platos con un buen vino será fácil, tienen una carta espectacular de vinos, muy completa, donde no solo se pueden encontrar Riberas y Riojas ya que están presentes otras Denominaciones de Origen como la vinos andaluces o gallegos. Terminar con un rico postre casero (por ejemplo las torrijas al estilo tarta de galleta con helado de vainilla) será el punto final de nuestra experiencia redonda de Perro Viejo.