El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha considerado, después de que el exministro socialista Jordi Sevilla defendiera que gobierne el candidato que más apoyos parlamentarios consiga, que, en caso de no haber un acuerdo, se debe dejar gobernar al más votado en las elecciones del 26 de junio.

Rajoy ha reiterado su defensa de esta máxima en declaraciones a los periodistas en Zaragoza después de que Sevilla planteara que se deje gobernar a quien más apoyos parlamentarios tenga. Al preguntarle los informadores cómo interpreta esas palabras, Rajoy ha dicho que él no interpreta nada y mucho menos las declaraciones de sus colegas políticos.

Pero, más allá de eso, ha considerado que es bueno que en España se forme un Gobierno sensato y responsable y que, en el supuesto de que al final no haya un acuerdo para que alguien tenga mayoría, se deje gobernar a quien los españoles le den mas votos. "Creo que es lo mas democrático que se puede hacer. En cualquier caso, espero que haya gobierno pronto porque no se puede estar tanto tiempo en una situación como la que hemos vivido", ha añadido.

Después de su visita de esta mañana en Tudela (Navarra) a una finca de cultivo de alcachofas, Rajoy ha aprovechado para defender ante los periodistas al campo español, al mundo rural, a la agricultura y a la industria agroalimentaria, asuntos de los que ha lamentado que no hablen habitualmente otras fuerzas políticas.

El líder del PP ha destacado la contribución de este sector a la salida de la crisis y, por ello, ha defendido los servicios en el mundo rural y, en consecuencia, el papel de las diputaciones provinciales.

Rajoy, preocupado por el 'sorpasso'

Más tarde, en una entrevista en 13TV, Rajoy ha asegurado que preferiría que el 26J no se produjera el "sorpasso" de Podemos sobre el PSOE, pero ha subrayado que lo que más le inquieta es que ambos partidos pactaran para llegar al Ejecutivo emulando sus acuerdos en ayuntamientos.

Rajoy ha reiterado que, al igual que hizo tras las elecciones del 20 de diciembre, él no afrontará una sesión de investidura si no cuenta de antemano con los votos suficientes para ser elegido.

Tras reprochar que sí lo hiciera el líder del PSOE, Pedro Sánchez, "sin que sirviera para nada", ha confiado en que sea posible un acuerdo para que prospere la investidura.

Si es necesario, él volverá a ofrecer una gran coalición con el PSOE y a la que podría sumarse Ciudadanos.

"Podemos encontrarnos en la misma situación de bloqueo, pero espero que si no quieren formar coalición, dejen que gobierne el primero. Si no, no hay salida", ha subrayado antes de reivindicarse como presidente si el PP logra ser la primera fuerza política el 26J.

Rajoy, que ha considerado que el debate a cuatro del pasado lunes "no fue excesivamente tenso", ha explicado que salió contento de esa cita y que intentó contrastar su proyecto para que España siga creciendo con la "confusión" existente en otros partidos.

Respecto a las críticas que le dirige el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha considerado evidente que ha elegido a Pedro Sánchez como su candidato a presidente y por eso hace una campaña atacándole a él.

"Es sorprendente la inquina con la que me distingue", ha comentado Rajoy, quien ha interpretado que es consecuencia de que cree que tiene que actuar así tras un acuerdo entre Ciudadanos y el PSOE que no gustó a muchos.

El candidato del PP ha defendido la actuación de todos los jueces con independencia de que juzguen a personas aforadas o no y ha reconocido que existe un problema pendiente con las denominadas "puertas giratorias".

"No tenemos bien resuelto qué es lo que puede hacer un dirigente político una vez que abandona la política. Creo que en el caso de la Justicia habrá que establecer unas incompatibilidades de bastante más plazo que las que existen en este momento", ha subrayado.

Y de la misma forma cree que ocurre cuando se sale de la política y se entra en empresas públicas.

"No parece lógico -ha precisado- que si se ha sido ministro de Industria, se empiece a trabajar en Iberdrola".

Rajoy ha vuelto a advertir del "golpe fuerte" que la salida del Reino Unido de la UE tendría en los mercados, ha considerado que si se confirmara esa decisión sería "un disparate" y ha confiado en que el referéndum reafirme la pertenencia a la familia europea.