El próximo 10 de noviembre se celebrarán las nuevas elecciones generales. Los comicios, los segundos a nivel estatal de este año, se convocaron automáticamente después de que ningún candidato obtuviera el respaldo del Congreso tras los que tuvieron lugar el 28 de abril.

Al tratarse de una repetición electoral, el calendario se ha acelerado un poco y se ha acortado en ciertos aspectos: los comicios se celebrarán 47 días después de la disolución de las Cortes, en vez de 54 (como suele ser lo habitual). Por otra parte, la campaña electoral y las subvenciones se reducen a la mitad.

Por primera vez, una campaña sin encuestas

En esta nueva cita se aplicarán por primera vez otros cambios incluidos en la reforma de la Ley Electoral del Régimen Electoral Generales (LOREG) . Entre ellos destaca que la campaña electoral comenzó el trigésimo octavo día posterior a la convocatoria, es decir, el 1 de noviembre, y que está tendrá una duración de ocho días --y no de quince--, por lo que concluye este viernes 8 de noviembre a las 00.00 horas.

Las modificaciones incluidas en la disposición adicional séptima de la LOREG traen consigo también cambios en los gastos y subvenciones electorales que pueden realizar o recibir las distintas formaciones políticas.

En concreto, los gastos que originen las actividades electorales se reducirán, en función de los votos y escaños obtenidos por cada candidatura, en un 30 por ciento. De su lado, el límite de los gastos electorales se reducirá en un 50 por ciento.

Rebaja de los anuncios de propaganda

Asimismo, la distribución del tiempo gratuito de propaganda electoral en cada medio de comunicación de titularidad pública se reducirá a la mitad de lo previsto en el baremo de que se establece la LOREG en su artículo 64.

Eso sí, las agrupaciones de electores y los partidos, federaciones y coaliciones que no la última vez lograron representación parlamentaria en las elecciones del pasado 28 de abril no necesitarán recabar de nuevo las firmas que exige la ley.

Es decir, si lograron presentar los avales de al menos el 0,1% de los electores inscritos en el censo electoral de la circunscripción por la que se presentaron en abril, esas firmas ya les valen para volver a presentar listas en noviembre.