Los vecinos de Torremolinos se enfrentan a las elecciones del día 24 con una maraña de partidos tradicionales y formaciones de nuevo cuño con nombres rimbombantes. Serán ocho las formaciones que optarán a ocupar el sillón de mando en la plaza de Blas Infante, dos más que en los anteriores comicios municipales de 2011.

De los seis partidos que se presentaron en 2011, sólo cuatro repiten en 2015 y sólo dos candidatos volverán a ser cabeza de lista: Pedro Fernández Montes, actual alcalde por el PP, y que ocupa el cargo desde hace veinte años, concretamente, desde 1995; y José Ortiz, por el PSOE. EL resto de partidos son IU, UPyD, Ciudadanos, Costa del Sol Sí Se Puede... Tic Tac, UCIN y Partido Andalucista.

Al contrario que en el vecino municipio de Benalmádena, las últimas legislaturas se han caracterizado por la tranquilidad institucional al obtener el PP una mayoría absoluta muy holgada, que ha permitido a Pedro Fernández Montes dirigir el municipio sin tener que rendir cuentas a nadie, ante la paupérrima representación de la oposición.

Aún así, en el Ayuntamiento se ha vivido una gran hostilidad entre los dos principales partidos. No han sido pocas las ocasiones en las que la oposición ha abandonado el salón de plenos por las férreas formas con las que Pedro Fernández Montes dirige la alcaldía. De hecho, en el último pleno de la legislatura, los concejales de la oposición abandonaron sus asientos al ser interpelados por el regidor sobre unas informaciones que vinculan el nombre del candidato socialista con el caso del fraude en los cursos de formación, algo que José Ortiz viene negando en repetidas ocasiones.

El candidato que resulte elegido y consiga formar gobierno el próximo 24 de mayo se encontrará con diversos frentes abiertos a los que tendrá que hacer frente los próximos cuatro años. Uno de los problemas que no podrán pasar por alto, pese a no ser de su competencia, es la lacra del paro. Uno de cada diez vecinos no tiene empleo y la brecha entre quienes tienen trabajo y quienes no cada vez es más grande. Por si fuera poco, el tejido empresarial está decayendo, con el cierre de cada vez más comercios en torno a la calle más comercial del municipio, la calle San Miguel.

En el debe quedan por resolver algunos de los grandes proyectos prometidos: el Centro Comercial más grande del sur de Europa, el agujero provocado por el abandono del hotel de cinco tres estrellas gran lujo Tres Carabelas, o la solicitud de nuevos proyectos educativos y sanitarios ante la Junta de Andalucía.

En las últimas semanas la corporación municipal ha solicitado al ente autonómico la creación de la enseñanza de Bachillerato en el IES Concha Méndez Cuesta y la implantación de un nuevo centro de salud en el hospital Marítimo, algo que la Junta rechaza.

Aunque las última palabra la tienen los vecinos de Torremolinos, el próximo 24 de mayo, todo parece indicar que la mayoría del Partido Popular está en el aire ante el empuje de las nuevas formaciones que concurren a los comicios, como Ciudadanos y Podemos -que se presenta a estos comicios bajo las siglas de Costa del Sol sí se puede-, unido al desgaste que supone llevar 20 años en el poder.

El actual alcalde del PP cuenta con un amplio colchón de cuatro concejales para mantener la mayoría absoluta pero las nuevas siglas contarán con representación en el Consistorio y podrían hacer tambalear esa diferencia.

Aunque no son extrapolables, la tendencia en el voto comparando las municipales de 2011 y las andaluzas de hace dos meses son muy significativas. El PP ha perdido nada menos que 26 puntos entre unos comicios y otros, mientras que el PSOE sólo ha perdido un punto e IU tres. En el otro lado de la ecuación electoral se sitúan Podemos y Ciudadanos que, de no tener representación alguna, pasan a tener el 17,37 y 15,38% de los votos, unos resultados que podrían acabar con la hegemonía del denominado señor de Torremolinos, cuyo modelo de gestión podría estar ya agotado a la vista de la tendencia de voto de las últimas elecciones.

Frente a estos partidos, a los comicios se presentan otras formaciones como Costa del Sol Sí Puede, con José Manuel Piña. Vuelve a presentarse en la localidad el Partido Andalucista, con el exconcejal popular José Ávila, y la Unión de Ciudadanos Independientes (UCIN) con Rafael Valle.

Algunos partidos ya se han visto envueltos en la polémica como Ciudadanos, ya que un grupo de críticos alegaban haber sido elegidos por los militantes y ser luego relegados por la dirección provincial para colocar a Ángeles Vergara en su lugar pese a no residir en la localidad. De hecho, la candidatura de UCIN está formada por antiguos militantes de Ciudadanos que abandonaron la formación al no estar de acuerdo con el proceso de designación de la candidata.

A pesar de ello, el fuerte soplo de cambio que emerge de los nuevos partidos, los últimos escándalos económicos a nivel nacional y cómo ha gestionado Rajoy la crisis dejan en el aire la mayoría absoluta de Pedro Fernández Montes.