José Cobos y Francisco Campos son dos cordobeses que llegaron como turistas a Málaga en 1971 y que se quedaron allí para toda la vida. Allí fundaron El Pimpi, la taberna con más solera de la capital y un lugar se ha convertido en un punto de encuentro para personalidades del mundo de la cultura.
Todo un ejemplo de gestión empresarial que ya se ha convertido en caso de estudio. Y es que, con motivo del interés que suscita su evolución y estrategia empresarial, El Pimpi ha firmado diversos acuerdos con diferentes museos, escuelas y universidades a los que ahora se debe sumar el suscrito con ESESA, "todo ello con un objetivo común: poner en valor los éxitos empresariales de la provincia que, además, promueven la cultura y la tradición de la ciudad".
El acuerdo
El presidente de ESESA, Antonio Pedraza, y la gerente de El Pimpi, Elena Cobos, firmaron un convenio de colaboración que recoge, entre otros aspectos, la elaboración de un caso práctico basado en el desarrollo del modelo de negocio y estrategia empresarial de tan emblemático establecimiento. Durante la firma del convenio han estado también presentes, José Cobos, propietario de El Pimpi, y Belén Jurado, directora de ESESA.
Con más de 40 años de historia, El Pimpi, es "todo un ejemplo de gestión empresarial adaptado a los nuevos tiempos que ha sabido visualizar los cambios y reaccionar antes de tiempo, apostando por la cultura, la gastronomía y la tradición malagueña" según su dirección. Así, a partir del próximo curso académico los alumnos de ESESA podrán conocer más de cerca, el desarrollo empresarial que lo ha llevado a convertirse en un referente dentro y fuera de nuestra provincia.
