Cada vez son más las grandes empresas y los responsables de las mismas que deciden apoyarse en herramientas novedosas para reducir y mejorar sus costes. La técnica más reciente y novedosa es el uso del Big Data, un análisis de la información de grandes dimensiones que ayudará a las sociedades más complejas o de mayor tamaño. ¿Cómo puede el Big Data ayudar al ahorro en el sector energético?

Una reducción gradual que no afecte a la organización

Las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías están extendiéndose a todo tipo de vertientes y aplicaciones. La última gran innovación ha sido la posibilidad de que las empresas utilicen el Big Data para la reducción de costes. La fórmula que se utiliza dispone de unos pasos muy concretos: identificar qué servicios o productos se pueden eliminar o disminuir sin que la rentabilidad de la empresa se vea afectada.

La base del uso de esta herramienta es la elaboración de un plan general de costes de reducción gradual, así como un análisis de su área funcional sin que la organización se vea perjudicada. Para su consecución, se pasa por diferentes métodos de seguimiento y de control del plan de ahorro de gastos, como las aplicaciones de visualización ad-hoc o el Business Intelligence.

El gasto tecnológico en las empresas está relacionado con el dato

Más de la mitad del gasto tecnológico en una organización de gran tamaño se ve relacionada con el dato de forma directa. El Big Data permitirá que se realicen posibles actos de mejora y que se evalúen los impactos. Además, servirá para analizar aspectos críticos que pueden ayudar a la reducción efectiva sin que conlleve el empeoramiento de la calidad o para detectar posibles riesgos en el plan.

Existen igualmente diferentes maneras de apoyarse en este fenómeno creciente, como las herramientas de la nube (cloud), de análisis de datos para explotar las ayudas económicas y las ventajas fiscales, así como otro tipo de aplicaciones online. Gran parte del uso del Big Data en una empresa consiste en que los proveedores cumplan los requisitos y los niveles adecuados de certificación. Con él se pueden aplicar las correcciones específicas y vigilar los objetivos de cumplimiento.

El Big Data frente al ahorro del consumo de la luz

Ahora es posible conseguir algoritmos propios en las grandes empresas para analizar el consumo. Con el Big Data pueden analizarse más de 1.500 millones de datos en tiempo real para la elaboración de un informe energético. También, permite crear patrones de consumo. De acuerdo con Emilio Bravo, CEO de Lucera, con esta herramienta se puede saber por qué un consumo determinado está por encima de lo debido.

Los datos que analiza el Big Data

Para que una gran empresa pueda explotar todas sus posibilidades, se deben analizar datos de diversas fuentes. Esto abarca prácticamente cualquier núcleo presente en una organización: procesos administrativos, operacionales, financieros, así como otros tipos de fuentes de entrada, como correos electrónicos, webs, formularios o blogs.

El ahorro de energía se basa en la ejecución, contratación y control de operaciones, al igual que en los costes por stock o en sus modelos de planificación. Se trata, en definitiva, de examinar cada proceso de la organización para impulsar mecanismos novedosos más económicos y de detectar las áreas de mejora.

El auge del Big Data ya está inundando a todas las grandes empresas. El resultado está siendo un análisis instantáneo y masivo de datos para que así, todo tipo de negocios puedan tomar mejores decisiones. En el sector energético también se ha convertido una herramienta imprescindible de ahorro, de un modo en el que los servicios ofrecidos no se vean afectados.