Tras casi veinte años al servicio de la enseñanza, España se le ha quedado pequeña. El progresivo aumento en la demanda de profesionales de la tanatoestética se ha convertido en una oportunidad única para ampliar las fronteras de su ya prestigiosa labor formativa en el campo de los servicios de acondicionamiento de fallecidos. Javier Chávez prepara las maletas en este 2017 con varios proyectos internacionales en activo. La aventura europea arrancará en Italia, donde ya ha impartido algún curso de tanatoestética.

Hasta ahora, Javier Chávez acogía en su programa de prácticas de tanatoestética a más de mil alumnos anuales procedentes de diferentes centros de formación de todo el territorio español. Con la llegada de estos nuevos proyectos europeos y la inevitable disminución de su disponibilidad, el tanatopractor, a través de su empresa Inzunza S.L., cederá la gestión de las prácticas a la empresa Delena Formación.

La relación con este centro de formación comenzó hace ya tres años y se ha ido consolidando gracias al compromiso mutuo en la lucha por la excelencia formativa en el campo de la tanatoestética. "Delena comparte mis principios en la dignificación de esta profesión y cuenta con el respaldo de la Universidad Rey Juan Carlos por lo que confiar mi actividad formativa de España en ellos es una garantía de futuro", explica Chávez.

Por su parte, la empresa malagueña ha recibido la noticia con alegría ya que supone un sello más de calidad y exclusividad para su gran apuesta por la tanatoestética y por su colaborador Javier Chávez.