­Recabamos las opiniones de varios realizadores latinoamericanos que han acudido al Festival de Málaga sobre el inminente futuro del certamen, que pasará a ofrecer «cine en español».

P. Van Hissenhoven (Colombia)

«Es fenomenal. El Festival de Cine de Málaga ha ganado un gran reconocimiento en la comunidad latina y es un paso muy oportuno para seguir creciendo en importancia. Sin embargo, y sin querer ser aguafiestas con esta nueva idea, pienso que asimismo es un festival muy importante para el cine español, y no debería perder esa ventana que pone a competir a las mejores cintas españolas. Así en el futuro no sea la sección oficial más trascendente, sí podría seguir existiendo ese espacio de sólo cine español».

Daniela Abad (Colombia)

«¡Me parece maravilloso! De verdad que sí. Es un festival que siempre me ha gustado y he admirado y he seguido con atención a lo largo de los años. Creo que cualquier cosa que implique una mayor apertura, una mayor permeabilidad, no puede ser más que que buena, no puede más que enriquecernos».

Nicolás López (Chile)

«Me parece una decisión maravillosa. Mientras mas exposición tenga nuestro cine, ¡mucho mejor!».

Aldo Garay (Uruguay)

«Me parece bien. Creo que Latinoamérica ha demostrado una gran diversidad de propuestas y estilos que sin dudas harán aún más atractivo al festival de Málaga».

Efraín Bahamón (Colombia)

«Me parece excelente que el Festival amplíe la muestra y que cada día que avanza el componente latinoamericano tenga más presencia. La permanencia y desarrollo de nuestro cine se nutre al entrar en diálogo con otras cinematografías. Ventanas como las que ofrece el Festival de Cine de Málaga hacen posible que una película pequeña como la mía [se refiere al largometraje Dos mujeres y una vaca, que compitió en Territorio Latinoamericano] acceda a más espectadores en el mundo. ¡Es una gran iniciativa!».

Roberto Anjari-Rossi (Chile)

«Excelente. Yo creo que la única forma para fomentar el nacimiento de una industria poderosa de cine en español es fomentar también la recepción de las diferentes audiencias de nuestros países a la diversidad de nuestras realidades. El cine argentino necesita audiencia en México, el cine chileno necesita audiencia en España, el cine español necesita la audiencia latinoamericana... Sólo así, y por supuesto con las políticas necesarias, se logrará un desarrollo del cine en español como industria».