ZonaZine nos propuso ayer un viaje al humilde barrio de Buenos Aires Isla Maciel con una joven de catorce años como guía, Tati, una chica que trata de encajar en su contexto sin apenas éxito. Es La Botera, cinta de la realizador Sabrina Blanco, rodada con «actores naturales, muchos de esa zona».

Los alrededores de Tati son duros: una adolescente entre la pobreza y el machismo no tiene una vida fácil. Así que seguimos a la chica, con una extraña afición por llevar un bote, descubriéndose a sí misma, sufriendo inseguridades y bullying en algunas ocasiones. Blanco aporta un tono feminista y dramático para retratar a este personaje y las dificultades que afronta en su día.

«L'Ofrena»

La competición más arriesgada del Festival de Málaga presentó la jornada anterior L'Ofrena (La ofrenda), el relato de una historia romántica y su desenlace veinte años más tarde, y cuyo director, Ventura Durall, relaciona con la «búsqueda del perdón a uno mismo». Los personajes de Jan (Alex Brendemühl), Rita (Verónica Echegui) y Violeta (Anna Alarcón) se encuentran con desafíos vitales y amorosos que han estado llevando durante años consigo mismos y que han tratado de extrapolar a los demás. El rodaje, organizado por partes, dio lugar a varios montajes, proceso en el que los actores participaron de forma activa, algo nada habitual: «Fue todo muy mágico», recuerda Brendemühl, quien tiene una curiosa relación con la película: «Cada día me gusta más y la entiendo menos».