Cultura

'Viva la calle': un documental para el debate

Movido pase ayer en el Teatro del Soho-CaixaBank de la obra que analiza la evolución reciente del corazón urbano de la capital

Pedro Marín Cots, ayer en la presentación del documental

Pedro Marín Cots, ayer en la presentación del documental / Grgorio Marrero

Isabel Cisneros

'Viva la calle' es uno de los documentales que el Festival de Málaga tiene este año en su programación. Y, quizás, uno de los más interesantes para el público malagueño. Su director, Juan Pablo Minguillón, y Pedro Marín Cots, responsable del Observatorio de Medio Ambiente Urbano y autor del libro homónimo en que se apoya el largometraje, han los testimonios y opiniones de 35 personas (empresarios, vecinos, políticos, historiadores del arte, artistas, arquitectos) para reflexionar sobre la evolución del Centro Histórico de la capital desde 1994 hasta 2022. Hubo lleno en el Teatro del Soho-CaixaBank en un pase muy movido, con aplausos pero también comentarios de desaprobación.

Se trata de una mirada coral, poliédrica, desde muchos puntos de vista, a acontecimientos fundamentales de la vida contemporánea del Centro de Málaga, como, por ejemplo, la peatonalización de la calle Larios. Así, Isabel Soto, empresaria de la zona, comenta en la película: "Recuerdo cuando salió el proyecto. Al principio estaba bastante asustada, pero ahora tengo que reconocer que fue una idea brillante. Me va genial". En el otro lado están los vecinos que viven aún en el Centro, como Amanda Romero, que reclama la incompatibilidad de la Málaga turistificada con la vida en su barrio: "No somos rentables y por tanto, sobramos". También hablan algunos de los profesionales que trabajaron en la peatonalización de calle Larios, como el arquitecto Iñaki Pérez de la Fuente (coautor del proyecto), quien rememora en la pantalla cómo se vivió ese momento en la ciudad: "Los malagueños vivieron ese proyecto como suyo. Antes de empezar la obra me dijeron que si salía mal me tenía que ir a Granada a vivir".

Según se explica en 'Vivir la calle', desde que Málaga empezó a tener museos se convirtió en una ciudad que "irradia cultura". Guillermo Busutil, periodista y escritor, reclama que la cultura en Málaga "se ha convertido en un producto" y que de este modo se disuelve el "verdadero objetivo de la cultura". En este debate entra también Antonio Guevara, decano de la Facultad de Turismo, que opina que "la cultura hay que trabajarla para los malagueños". Y Alfonso Miranda, un vecino del Centro, añade que el turismo es "masificación" y que "no es VIP" como prometía el alcalde de Málaga. "El turismo empieza por lo malo", sentenció. Y el Teatro del Soho en ese momento estalló en aplausos.

Porque la llegada masiva de turistas al Centro de Málaga es el asunto más candente para los espectadores. Cuando los diferentes vecinos exponían sus opiniones sobre la masificación, el patio de butacas ovacionaba con aplausos y gritos como "¡Eso es!". Como, por ejemplo, cuando Francisco Cano, presidente de la Asociación de vecinos y comerciantes de la calle Andrés Pérez, comparó Málaga con Magaluf: "Nos vamos a convertir en Magaluf, ¿tú te irías allí de vacaciones?".

Por su parte, Guillermo Busutil explica que Málaga debería identificarse más con su pasado romano o griego que con los fenicios: "Málaga no acude al ADN romano o griego de cultura y convivencia en pequeñas polis y está más pendiente de ser un mercado, como los fenicios que eran comerciantes. Lo que nos hace feliz va a hacerse tan pequeño hasta ser una pompa de jabón que se disuelve en el aire".

Al final de la proyección, uno de los asistentes exclamó: "El documental es una mierda y sólo cuentan mentiras. Málaga es para los ricos". Como ven, la cosa da para debate.