El tenor actuará el próximo 7 de agosto en Medjugorje, en Bosnia-Herzegovina, uno de los más conocidos santuarios marianos de la región desde la supuesta aparición de la Virgen en 1981, al que acuden millones de turistas del mundo entero.
En declaraciones que publica hoy el diario sarajevita "Avaz", Bocelli aseguró que, como persona profundamente religiosa, se ha preparado con minuciosidad para esa actuación, que tendrá lugar frente a la iglesia de Sveti Jakov.
Bocelli declaró que, aunque se formó como abogado, la música es su vida y que es "el camino predestinado para comunicar con otros".
"Al ver el éxito que he tenido como cantante, creo que un abogado menos no supone ninguna pérdida para el mundo", señaló.
También indicó que dispone de poco tiempo libre, pero que para él la familia "siempre ha estado en el primer puesto" y que se ha esforzado "para armonizar los compromisos profesionales con las responsabilidades y la satisfacción que conlleva ser padre".
El artista no descartó que sus hijos se dediquen a la música, aunque aseguró que les dejará a ellos decidir su orientación profesional.
"Mis hijos todavía están en la fase en que sueñan con la vida, una fase de confusión positiva, magia intocable, que no deja de sorprendernos a los padres" explicó.
Bocello añadió que sus hijos "estudian música, como deberían hacerlo todos los niños en escuelas o en clases privadas" pero aseguró que los apoyará "cualquiera que sea su decisión" al igual que sus padres le apoyaron a él.
Sobre sus progenitores, el artista italiano indicó: "Aunque no eran músicos, me comprendieron, y no lo olvidaré nunca. Fui feliz y quiero que también mis hijos lo sean".
