Según informan hoy los medios británicos, Boyle fue llevada ayer en ambulancia a la clínica Priory, en Southgate (norte de Londres), un día después de que la cantante -favorita para ganar la edición 2009 del programa "cazatalentos"- quedara en segundo lugar.

El personal de "Britain's Got Talent" se puso el domingo en contacto con la Policía porque Boyle, de 47 años, actuaba de manera extraña en el hotel londinense donde estaba hospedada.

"A la Policía se le contactó hacia las 18.00 horas de ayer (17.00 GMT) desde un hotel del centro de Londres porque los médicos evaluaban a una mujer en virtud de la Ley de Salud Mental", señaló una portavoz de Scotland Yard.

"La mujer fue llevada de manera voluntaria en ambulancia a la clínica. Por petición de los médicos, la Policía acompañó la ambulancia", agregó la fuente policial.

El grupo musical "Diversity", formado por varios adolescentes, fue proclamado ganador del programa el pasado sábado después de que el público votara por teléfono.

Según los medios británicos, Boyle estaba agotada mentalmente tras su participación del sábado, en la que cantó "I Dreamed a Dream" (Soné un sueño), y los médicos le han aconsejado un periodo de descanso para recuperarse.

La escocesa saltó a la fama en todo el mundo tras su primera participación en "Britain's Got Talent", en el que sorprendió a la audiencia por su talento como cantante.

Desde que cantó por primera vez hace unas semanas, Boyle recibió numerosas ofertas para actuar, entre ellas una gira por EEUU en la que puede ganar unos 8,9 millones de euros (12,6 millones de dólares).

Boyle, desempleada, cautivó a los británicos con su voz y sencillez, si bien en los días previos a la final se sintió abrumada por la atención mediática por lo que los responsables de "Britain's Got Talent" decidieron "esconderla" en un lugar tranquilo y alejado de las cámaras.