Revisa tus facturas, ¿tienes el control de tus finanzas?

Revisa tus facturas, ¿tienes el control de tus finanzas?

Conocer bien tus finanzas se antoja fundamental para conseguir esa estabilidad financiera que todo el mundo anhela, pero, ¿estamos haciendo lo suficiente para alcanzar este objetivo? ¿realmente conoces qué estás pagando mensualmente en tus facturas?

por Fran Garrido

Quizás el marco actual no es el escenario más deseable para intentar cumplir nuestro objetivo de optimizar nuestras facturas: La subida de energía, un mercado inestable, no conocer bien el consumo que necesitamos y contratar tarifas inadecuadas, las facturas de suministros (como la electricidad o el gas) … una economía tan intempestiva que hace necesario replantearnos si estamos administrando el dinero de la manera más eficiente, siempre dentro de nuestras posibilidades.

¿Conoces realmente cuánto gastas y en qué?

Ni que decir tiene que la dificultad de la planificación para conseguir un ahorro suficiente con el que alcanzar tus objetivos no es una tarea sencilla. Por este motivo y antes de fijarte cualquier tipo de meta, debes realizar un buen análisis, no solo de tus gastos, si no de tu situación personal, de tu salario o ingresos y, sobre todo, de cuánto quieres ahorrar mensualmente. No te pongas objetivos irrealizables, intenta ir de menos a más e ir modificando el objetivo en función de tu experiencia.

Es fundamental contar con un listado de gastos fijos (con una simple hoja de Excel, un Google Drive o el bloc de notas de tu smartphone será más que suficiente) y sobre todo, no olvidarte de contar con los impuestos.

Este listado mensual te ayudará a analizar tu balance de gastos e ingresos y conocer el mejor momento para ahorrar, por ejemplo, para unas merecidas vacaciones.

La Regla 50-30-20

¿Nunca habías leído o escuchado nada sobre esta fórmula de ahorro? Quizás no sea necesario llevarla a raja tabla pero puede servirte de guía para comenzar a alcanzar esas pequeñas metas que te hayas fijado en un principio. Es un gran método para ahorrar, pero teniendo en cuenta cierto gasto (o inversión) para algunos antojos (no tiene por qué ser necesario padecer para ahorrar). La idea es utilizar el 50% de nuestros ingresos para las necesidades básicas (conexión a internet, luz, agua, energía etc.), un 30% para ocio o “caprichos”, y el 20% restante destinarlo al ahorro. Si te fijas, en estos dos últimos tienes otra posibilidad de “jugar” con tus ingresos, aumentando el ahorro cuando quieras cumplir algún objetivo, sacrificando a cambio algún gasto no necesario.

Administrarte te ayudará a sentir con mayor tranquilidad y por supuesto, seguridad.

Tips para ahorrar en tus facturas de suministros

  • Factura de la luz
    Uno de los puntos más importantes a tener en cuenta es sin lugar a dudas la tan mencionada factura de la luz. Antes de contratar una tarifa en cualquier compañía, debemos siempre intentar encontrar la libertad de un contrato que no tenga permanencia, ya que, aunque en un primero momento puede tener sus ventajas, una vez que estas acaben, eliminamos la libertad de poder elegir algo mejor en el momento que más nos haga falta.

    En cuanto a la nueva tarifa que entró en vigor en España recientemente, debemos tener en cuenta varios factores para que no se nos dispare la factura.

    Como probablemente ya conozcas, esta nueva fórmula conlleva un cambio de tarificación en función de la hora y día de la semana en la que nos encontremos, desde la más cara en “horas punta”, las horas de un precio medio en “horas llanas” y, por último, las que más económicas y que más interesan, las “horas valle”.

    Teniendo en cuenta esto, y que el fin de semana y festivos son considerados horas valle, debemos intentar reorganizar nuestro consumo e intentar reubicar el máximo posible en estas horas valle, aunque en algunos casos no será posible, si nos organizamos bien tendremos mucho ganado.

    Por último, también puedes tomar una serie de medidas que vendrán perfectas para reducir la factura, como, por ejemplo, utilizar bombillas LED (consumen más de un 80% menos que las tradicionales y duran más), comprar electrodomésticos con clasificación energética A, B o C, que pueden suponer un ahorro superior al 65%, utilizar la lavadora o el lavavajillas solo cuando estén llenos y, especialmente en verano, ajustar la temperatura y mantener el hogar a unos 24 grados, evitando así un consumo innecesario.

  • Factura de agua
    Como no podía ser de otra manera, el agua es otro de los factores que debemos tener muy en cuenta. Ya no solo por la protección del medio ambiente sino para que la factura no aumente más de lo necesario.

    En nuestra día a día realizamos diversas actividades que llevan asociado el consumo de agua, pero como en el caso de la factura de la luz, puedes incluir en tu rutina algunas recomendaciones para reducir el consumo:

    1. Cerrar el grifo mientras no se esté usando (mientras friegas los platos, te afeitas o lavas los dientes).

    2. Si cuentas con este tipo de lavavajillas, además de utilizarlo siempre que esté lleno, utiliza el programa ahorro.

    3. Cada vez es menos frecuente, pero priorizar la ducha en lugar del baño, supone un ahorro de más de 100 litros.

    4. No tires desperdicios por el WC, no es una papelera, y en el caso de contar con ello, utiliza de manera eficiente el doble botón.

    5. También puedes utilizar un difusor en la alcachofa de la ducha y de este modo, reducirás el consumo sin darte cuenta.

  • No olvidemos que el agua es un recurso limitado y si podemos reducir costes y de paso cuidar este recurso natural haciendo un uso responsable del mismo, mucho mejor.

Cómo ahorrar en tu factura de Internet, teléfono y en suscripción a plataformas de entretenimiento

Casi sin prestarle atención, cada mes pagamos una factura más o menos elevada en telecomunicaciones, ya sea para contratar una conexión a internet, contar con teléfono móvil o disfrutar de plataformas de entretenimiento.

  • Busca la mejor oferta y contrata lo que realmente necesitas
    Antes de tomar la decisión de qué es lo que estás buscando, lo primero que debes hacer es comparar. Todo es cuestión de evaluar qué prestaciones necesitamos (en el caso del teléfono), cuántos megas y qué tarifa es la que mejor se ajusta a nuestro uso, tal y como mencionábamos con la tarifa de la luz, intentar evitar los compromisos de permanencia y evitar a toda costa una contratación impulsiva, comparando todos los precios y modalidades.

    Si estás buscando un servicio completo (internet, móvil, fijo y TV) lo ideal es que contrates uno de los packs que los incluyen. Los precios son más competitivos y verás tu factura reducida.

  • Plataformas de entretenimiento
    En el año 2015 se dio un giro en España a la creencia generalizada de que no era posible seducir al usuario español con un contenido multimedia de pago, cuando este lo tenía de manera “gratuita” en otro tipo de portales.

    Desde entonces nos hemos acostumbrado a pagar por contenido de entretenimiento en plataformas. De hecho, es habitual que, aunque se pague por un pack de internet, móvil, fijo y TV, se contraten más plataformas para completar al máximo posible la oferta de contenido a tu alcance.

    Aunque no sea el gasto fijo mensual de mayor importancia para nuestros bolsillos, no es desdeñable poner especial atención si se está pagando por algo que no llegamos a consumir. Existe cierta tendencia a estar presentes en más de una plataforma y debemos plantearnos si es realmente necesario o si directamente hacemos uso de ella. Quizás una opción es ir jugando a darnos de alta y baja de uno y otro en función del nuevo contenido que se vaya estrenando y que resulte de interés.

Análisis mensual

Una vez hayas cambiado ciertas cosas de tu día a día y hayas empezando a realizar compras y contrataciones de manera mucho más inteligente, realiza un análisis mensual para analizar resultados y prestar más atención a otros aspectos que se te hayan podido escapar. De este modo irás optimizando y ganando en eficiencia mes a mes. Tus objetivos estarán cada vez más cerca.

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