El Centro de Protonterapia Quirónsalud introdujo este tratamiento innovador en España en diciembre del 2019 y, pese a la pandemia, ha atendido a un centenar de pacientes, el 60% de ellos pediátricos

El 2020 ha sido un año más que complicado para la Medicina y los profesionales de la sanidad, que han tenido que volcar todos los esfuerzos posibles en frenar el impacto de la covid-19. Sin embargo, las especialidades médicas no vinculadas directamente con el fatídico virus han podido seguir avanzando en sus campos, mejorando la calidad asistencial, los tratamientos que ofrecen.

Un claro ejemplo de este avance lo encontramos en el Centro de Prontoterapia Quirónsalud, encargado de introducir en España la protonterapia, un tratamiento avanzado contra el cáncer que aplica radioterapia externa con protones gracias a una tecnología de vanguardia hasta hace un año no disponible en nuestro país.

El centro, que a finales de diciembre del 2020 cumplió un año, es el primero de sus características en España, tanto en la sanidad pública como en la privada. Ubicado en Pozuelo de Alarcón (Madrid), ha permitido atender a más de cien pacientes con cáncer a través de la terapia de protones. Ha mantenido su actividad de forma ininterrumpida, a pesar de la pandemia que estamos viviendo, adaptando sus protocolos a las exigencias del contexto sanitario.

Precisión y seguridad gracias a los protones

Mientras que en las técnicas de radioterapia convencionales se utilizan fotones, electrones y otras partículas de alta potencia para destruir las células cancerosas, la protonterapia utiliza protones, partículas con carga positiva de alta potencia que pueden destruir las células cancerosas a través de una dosis concreta de radiación. Estos protones se producen a través de átomos de hidrógeno, que se aceleran mediante un ciclotrón para extraerles el único electrón del que disponen.

El resultado son unas partículas pequeñas, mucho más que los fotones o electrones, una característica que mejora la precisión del tratamiento, puesto permite atacar directamente el tumor responsable del cáncer sin dañar los tejidos de alrededor. Tan solo disipa una dosis mínima a las zonas laterales del tumor; es por este motivo que este tratamiento supone un avance histórico en la lucha contra el cáncer.

Gracias a sus características, la protonterapia reduce la dosis total de radiación que recibe el paciente, el riesgo de tumores secundarios radioinducidos y, en consecuencia, mejora la calidad de vida del paciente mientras recibe el tratamiento y a posteriori. Es considerada una terapia mucho más segura y efectiva que las anteriores y está indicada para pacientes con tumores en zonas sensibles del cuerpo, como el sistema nervioso central, el área de la cabeza y el cuello o diferentes tipos de sarcomas recurrentes, además de tumores en niños y adolescentes, puesto que sus órganos están todavía en desarrollo y son si cabe más sensibles a la radiación. Sin ir más lejos, el 60% de los pacientes del Centro de Protonterapia Quirónsalud son niños.

La lucha contra el cáncer da un paso adelante gracias a la terapia de protones, mucho más segura y efectiva que los tratamientos convencionales

En el caso del centro de Pozuelo de Alarcón, la terapia se administra a través del sistema Proteus One, un acelerador de la familia de los ciclotrones que utiliza la criogenia. Gracias a sus ventajas, es el que utilizan el 70% de los centros que ofrecen esta terapia en todo el mundo. Además, Proteus One está preparado para la terapia rotacional y las irradiaciones de muy alta intensidad, técnicas que están actualmente en investigación para tratar el cáncer en un futuro.

Para administrar correctamente la terapia con protones, el Centro de Protonterapia Quirónsalud cuenta con un equipo multidisciplinar de profesionales formados en centros de referencia de Estados Unidos, Suiza e Italia y que tienen experiencia en la administración de la protonterapia a nivel internacional. La máquina que dispensa la terapia cuenta con un sistema robotizado, que permite que el paciente reciba el haz de protones desde cualquier ángulo, aumentando de esta forma la precisión del tratamiento. Además, incorpora un sistema de escaneado del tumor, facilitando la aplicación de los protones exclusivamente al área afectada.