Un gato en precario equilibrio sobre una cornisa es una imagen muy presente en Actrices secundarias que bien puede simbolizar este significativo libro de cuentos de Purificación García Díaz (Málaga, 1961), que acaba de editar Recuento. Como el gato, los personajes femeninos de esta obra de múltiples voces van por la vida en equilibrio precario, lo que no significa que estén derrotados, pues muchas veces son capaces de darnos una sorpresa final, inesperada para el lector.

Purificación García Díaz, licenciada en Filología Inglesa afincada en Cádiz, ha dado voz a mujeres que están en un segundo plano, a veces, niñas que desentrañan con dificultad los misterios en ocasiones terribles del mundo de los adultos; otras, personajes que son testigos de la lucha de otras mujeres por abrirse paso en el día a día.

Se nota sin duda la unidad que ha pretendido dar al libro, muy rico en matices, capaz de integrar relatos epistolares con poéticos y breves retazos en primera persona, algunos difíciles de olvidar como Al borde del abismo. Tiene la escritora malagueña una forma de narrar muy concisa y cinematográfica, intimista, pendiente de detalles y sentimientos, como si de una película de Isabel Coixet se tratara.

Pero este rápido sobrevolar Actrices secundarias se quedaría cojo sin resaltar el predominio de la música en buena parte de los relatos. Las mujeres de Purificación García viven y sienten la música; en uno de los cuentos, la narradora describe con detalle una habitación y a sus personajes, «mientras en mi cabeza no dejaba de sonar La vie en rose»; en otro, una mujer trata de aplacar el desasosiego de su amiga Mildred con Etta James... detalles que enriquecen un libro de relatos original, enfocado en esas voces secundarias de mujer que nos desvelan sus secretos, gracias al buen trabajo de la escritora malagueña.