Cuando nació, su padre estaba lejos, en el ejército. Más tarde fue abandonado por su madre. Tuvo una infancia marcada por la pobreza. No le fue bien en los estudios ni tampoco en su pretendida carrera militar: los motivos por los que se alistó como paracaidista no eran otros que asegurarse tres comidas al día y un lugar estable en el que dormir. La vida de Jimi Hendrix tenía todos los ingredientes para ser una sucesión de desgracias, pero la música se convirtió en su vía de escape, en el cauce perfecto en el que volcar su creatividad y todas sus emociones. Primero acompañó a las grandes estrellas del momento -Little Richards, Ike & Tina Turner, Wilson Pickett, Jackie Wilson, Isley Brothers- y más tarde se convirtió en una de las figuras más valoradas del rock de todos los tiempos y en un guitarrista cuya destreza sigue siendo a día de hoy un referente de primerísimo primer orden. El próximo año se cumple medio siglo desde su fallecimiento, en 1970, pero ni el paso del tiempo ni los avances tecnológicos aplicados al instrumento de las seis cuerdas han sido capaces de hacerle sombra, porque, en ese sentido, Hendrix sigue siendo hoy una estrella inalcanzable.

En el volumen Hendrix. La historia ilustrada (Blume), la periodista musical Gillian G. Gaar desgrana cada uno de los episodios de la corta pero intensísima biografía del autor de Purple haze, cuya carrera musical no duró más de cuatro años, de 1966 a 1970. Un texto que recorre la discografía oficial del músico de Seattle, que solo dejó en vida tres discos de estudio -Are You Experienced (1967), Axis: Bold as Love (1967) y Electric Ladyland (1968)- y el directo Band of Gypsys (1970), y que profundiza en los principales hechos que catapultaron su popularidad. Jimi Hendrix dio sus primeros pasos hacia el éxito en la escena underground de Londres. Su propuesta se consideró como una de las más vanguardistas y valientes de finales de los sesenta. Su primer álbum no alcanzó el número uno de las listas porque coincidió con el lanzamiento del Sgt. Pepper's de los Beatles, por lo que tuvo que conformarse con el segundo puesto. En tiempo récord se convirtió en un fenómeno de masas, aunque su personal concepción de la música colisionó con las pretensiones y la ambición de la industria. Este choque desquebrajó su ánimo hasta el punto de llevarlo a refugiarse en las drogas y el alcohol, un cóctel mortal que sesgó su vida cuando solo tenía 27 años.

Hendrix. La historia ilustrada ofrece una profusa investigación sobre la vida y obra del guitarrista, que cuenta testimonios de su familia, amigos y otros músicos, y una interesante galería de fotografías poco conocidas.