Panini compila en un nuevo Omnigold las andanzas de Spiderman en los primeros años ochenta.A finales de los años setenta, la personalidad de Peter Parker protagonizó un sustancial cambio. El hasta ahora introvertido estudiante, que debía lidiar al mismo tiempo con las clases, los exámenes, las fiestas universitarias y su secreta labor de superhéroe, pasó a convertirse en todo un hombrecito con la llegada de los ochenta. Con el paso a la edad adulta sus historias iniciaron una etapa de transición a manos del recientemente fallecido guionista Denny O'Neil, que regresaba a Marvel tras años en DC, y el hijo de John Romita, que iniciaba aquí su fundamental trabajo en la cabecera arácnida. Ambos introdujeron al trepamuros en la nueva década y crearon inolvidables personajes, como Hidorman y Madame Web. El nuevo Omnigold de Panini dedicado a las historias clásicas de Spiderman (ya van diez) ofrece una veintena de números, de los años 1980 y 1981, y dos imprescindibles anuales dibujados por un joven de estilo inconfundible: el grandísimo Frank Miller.