Rachel Cusk: el mito roto de la maternidad

En ‘Un trabajo para toda la vida’, Cusk destroza ese mito de la madre realizada y de la relación idílica con su primer hijo

Rachel Cusk.

Rachel Cusk. / L. O.

Francisco Millet Alcoba

Cuando Rachel Cusk escribió en 2001 ‘Un trabajo para toda la vida’, un ensayo franco y honesto sobre «la extraña realidad de la maternidad», se sorprendió por la reacción de muchas personas, especialmente mujeres, a las que el libro le pareció ofensivo. Junto a críticas muy elogiosas, por su honestidad, Cusk tuvo otras rabiosamente feroces que la acusaban de mala madre.

Por ello cuando en 2007 el libro volvió a editarse, lo hizo con una introducción de Cusk en la que salía al paso de aquellas acusaciones. «A los periodistas que me acusaron de ser una madre inepta y poco cariñosa, a los detractores que aún emplea mi nombre como sinónimo de odio a los niños a las mujeres que me criticaron les digo que no escribí este libro porque necesitara su aprobación. Lo escribí porque soy escritora y la ambivalencia que caracteriza las primeras etapas de la crianza me pareció afín a la ambivalencia fundamental que siente el escritor ante la vida». Desvela que escribió el libro para esos «hombres y mujeres que reconocen en el hecho de ser padre o madre una experiencia primordial de desmembramiento entre uno mismo y los demás»; también para las personas que valoran «las vicisitudes personales mas que la falsedad colectiva» .

Y todo ello porque ‘Un trabajo para toda la vida’, que ahora finalmente llega a España, con cierto retraso quizá, de la mano de Libros del Asteroide, saca a relucir lo que era un secreto bien guardado por la sociedad: que las madres primerizas no son tan felices como aparentan ni como el resto quiere pensar.

La sociedad tiene inoculado el mensaje de que el nacimiento y los primeros meses de un hijo son los momentos más hermosos en la vida de una mujer. Pero en su libro, Cusk destroza ese mito de la madre realizada y de la relación idílica con su primer hijo. Muchos -sobre todo, muchas- no se lo perdonan. De ahí las críticas feroces.

El ensayo de Cusk es un relato profundamente personal de una experiencia que todas las madres han compartido, pero que casi nunca se representado en la literatura: la joven madre queda despojada de su yo social y se convierte en esclava de la supervivencia de su bebé, cuya existencia es en esta etapa de su vida, es limitada

Cusk explica como la nueva madre se ve obligada a deshacerse de su yo social, de la vida llevada hasta entonces, y debe aceptar reducir sus actividades al mínimo estricto por el bien del bienestar de su hijo dentro de esa especie de campo de concentración en se convierte su casa.

La madre se encuentra así recluida en una especie de búnker aislado del resto del mundo, vigilado por las otras madres, matronas, médicos, familia, y en un mundo reducido.

Adoptando un enfoque nada sentimental de uno de los cambios más trascendentales en la vida de una mujer, Cusk disecciona el proceso de la nueva maternidad desde una perspectiva psicológica y emocional.

Su estilo seco y honesto es un cambio refrescante para cualquiera que busque comprender las realidades diarias de asumir una responsabilidad tan enorme. A pesar de un tono a veces sombrío y aprensivo, Cusk capta a la perfección el conflicto inherente entre los placeres conocidos antes del bebé y los que el bebé trae.

Dando gran importancia al impacto mental y físico de convertirse en madre, intenta traducir sus experiencias privadas con la esperanza de que otras madres se encuentren reconocidas.

Además, todos estos temas están al servicio de un tema más profundo: el dolor de convertirse en madre, las profundas ansiedades y dudas que Cusk tiene sobre su mundo cada vez más pequeño y las transformaciones del yo que necesariamente ocurren. Para articular estos pensamientos, Cusk utiliza todo un almacén de metáforas para describir tanto a su nuevo yo como a su bebé. Así, a través de doce capítulo, relata lo que supone las cuarenta semanas de embarazo, los cólicos, los deseos de querer abandonar, la lactancia, el olvidarse de las noches de sueño placentero... y en definitiva el conflicto entre ser mujer y ser madre y como tener éxito en ser uno significa fracasar en ser el otro.

Rachel Cusk

  • Un trabajo para toda la vida
  • Editorial: Libros del Asteroide
  • Traducción: Catalina Martínez Muñoz
  • Precio: 18,95€

Rachel Cusk es dueña de un modelo claro y genuino de escritura reflexiva, profunda e introspectiva que utiliza siempre en sus relatos para indagar y cuestionar, como en ‘Un trabajo para toda la vida’, sobre problemas que le agitan como la feminidad en un mundo de acerbo machista o la búsqueda de la libertad personal, que la maternidad impide. Cusk tiene seguridad en sus pensamientos y los transmite con convicción y audacia. Hay firmeza en su prosa y en su discurso. Hay madurez.

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