Novela
Gijón y la «vieja reina Leonor»
Rubén González Tuero gana el Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid de Novela con la futurista ‘Gijón 2085’

Rubén González Tuero / l.o.
‘Gijón 2085’, una novela ambientada en un inquietante futuro inmediato, ha sido la ganadora de la 72 edición del Premio de Novela Ateneo-Ciudad de Valladolid, obra del profesor gijonés de Secundaria Rubén González Tuero (1962).
Se trata de una novela policiaca que transcurre el año que da título a la obra. Indudablemente, lo mejor de este libro es todo el trabajo de encuadre temporal que hay detrás, para hacer creíble cómo será ese rincón de España dentro de seis décadas.
En la rama de la ciencia ficción, y quizás por el optimismo que depararon los primeros años de la carrera espacial, se idearon futuros relativamente inmediatos que, el tiempo demostró, resultaron tecnológicamente demasiado desarrollados y, por tanto, han dado lugar a obras poco realistas, desde el punto de vista de la proyección en el tiempo.
Rubén González Tuero parece haber tenido bien claro esta pauta, con vistas, probablemente, a ofrecer una trama policiaca que no se vaya por los cerros de Úbeda o incluso de Marte, con la excusa de que transcurre en el futuro próximo.
En este sentido, parece haber trabajado, con la proyección en 2085, como una suerte de ‘futurista historiador contrafactual’.
Y el mundo que nos ofrece el profesor gijonés de Secundaria, desgranado a lo largo del argumento en pequeñas pinceladas, es una Agrupación Cantábrica que incluye las provincias de Asturias, Cantabria y León, convertida en el principal centro tecnológico de la República Federal Española. Por cierto que, más adelante, el lector descubrirá que «la vieja reina Leonor» se encuentra en el exilio.
Por lo demás, la principal característica de este escenario es que el cambio climático ha hecho estragos e inundado la ciudad de Gijón, que se ha reconvertido para levantar ‘la Barrera’, un gigantesco complejo que produce electricidad de las ciclópeas mareas.
Será en una de esas turbinas mareomotrices donde se encuentre el cadáver desnudo de un miembro de la alta sociedad de la ciudad. El destino hará que se crucen un periodista y un policía, que tratarán de desentrañar el caso. En la novela, por cierto, el autor elucubra también sobre el peso creciente de la Inteligencia Artificial, omnipresente en la obra y convertida en un personaje más y el control exagerado que la tecnología ejerce sobre la población, al tiempo que crece la desigualdad todavía más que en nuestros días. En la otra cara de la moneda, despliega un catálogo de avances médicos que, una vez más, entran dentro de lo plausible y esperanzador.
El marco por tanto es tan creíble y conseguido que resulta lo más destacado de esta novela; en la que la trama, lejos de perseguir un golpe final, se va adivinando de forma gradual por expreso deseo del novelista.
Por eso, más allá de la correcta intriga policíaca; de nuevo la ciencia ficción y, en este caso, un futuro a la vuelta de la esquina, sirve para que el lector vaya más allá del entretenimiento y reflexione, junto con el autor, sobre los excesos de la tecnología, los límites del poder o los desvaríos imparables del clima. Y todo por culpa de la codicia humana. Nada nuevo bajo el sol.

Gijón 2085
Autor: Rubén González Tuero
Editorial: Menoscuarto
Páginas: 375
Precio: 21,90 €
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