Cuadernos
Miscelánea de un autor exquisito
Vicente Luis Mora acaba de publicar ‘En esta red sonora’, libro donde recoge «esquirlas, piezas, pecios» que ha ido acumulando en cuadernos a lo largo de los años y que, sin embargo, forman un conjunto

Vicente Luis Mora. / l.o.
Se es escritor como se es pelirrojo, irremediablemente. Y cuando se es escritor todo en tu vida gira en torno a la palabra escrita, tanto como receptor/lector como emisor/autor. Y cuando no estás escribiendo esa obra en marcha que todo escritor está siempre escribiendo, tomas notas, apuntes de ideas, de pensamientos, de brotes que algún día, puede que sí, puede que no, acaso se desarrollen en obras más complejas o se queden ahí para siempre. Nunca se sabe, pero lo que sí es sabido es que es inevitable que los escritores se pasen la vida tomando esos apuntes en cuadernos que atesora porque saben que con toda probabilidad su contenido acabará teniendo alguna utilidad.
Con esos cuadernos llenos de ideas, apuntes, anotaciones, que ha acumulado a lo largo de los años, nos presenta Vicente Luis Mora ‘En esta red sonora’. El mismo autor señala en el prólogo que «durante décadas he reunido fragmentos, esquirlas (como las llamase mi querido Antonio Martínez Sarrión), piezas, versos y pecios (ojalá ferlosianos) que han ido viniendo por azares y chispazos neuronales…
Sin embargo, ese tinte de futilidad que expresa el autor en el prólogo y que se repite conceptualmente en el texto de contraportada del libro, donde se señala que el volumen contiene »«ideas a la intemperie, apuntes volanderos que desean perderse en los cajones, polémicas de una línea, reseñas de dos párrafos, novelas de tres páginas, pensamientos encontrados en libretas, anotaciones sueltas en agendas, ensayos tan breves que no pueden publicarse exentos, versos sin poema y poemas huérfanos de poemario, intuiciones huidizas, notas de lectura agazapadas en las páginas de respeto al final de los libros, aforismos desubicados, epifanías, pedazos, apotegmas», no se corresponde con la realidad. Sería muy banal un libro así, y no correspondería con la profundidad y riqueza de la obra de este autor.
Es cierto que son textos muy breves, que acaso, corriendo un tremendo riesgo, pudiéramos señalar que la obra puede entrar en el catálogo de escritura fragmentaria (que no fragmentada), pero eso no le resta un ápice de su valor.
A lo largo de las páginas de ‘En esta red sonora’ encontraremos, es cierto, una serie de textos que podrían parecer islotes, atolones solitarios (por usar un símil que el propio Vicente Luis Mora emplea), pero que en realidad forman un archipiélago, si bien marcado «por la discontinuidad y la rotura».
Hay una predominancia de textos sobre el propio hecho de escribir y sobre la labor de la crítica literaria. Encontramos ahí a un crítico exigente, con un profundísimo conocimiento de la literatura y con un asentado criterio sobre qué es una obra literaria. Es posible que tras la lectura de este libro muchos escritores teman enfrentarse al examen que pueda hacer Mora de sus obras, porque muy pocas podrán alcanzar los estándares que establece: «Reseño favorablemente un libro de cada treinta o cuarenta que leo. Si reseñase de forma entusiástica uno de cada dos, o todos, se me reprocharía carencia de juicio (…) Me gustaría que esa misma prudencia, la elección de una sola entre cada treinta visionadas, rigiese la actividad de los críticos de series televisivas. Quizás así me tomaría sus recomendaciones en serio», o esta sentencia tan directa: «Leer es salir de caza».
En otras partes del libro Vicente Luis Mora se acerca a la literatura aforística, aunque él mismo señale en la página 235 (nota 2) que no son aforismos: «por eso no escribo aforismos, sino criaturas híbridas y secuenciales entre el nanoensayo, la greguería y el verso». Es evidente que las líneas divisorias entre los géneros brevísimos son difíciles de determinar, pero acaso no interese tanto (o no interese nada) la taxonomía y sí el contenido literario, esto es, la capacidad de emoción y la sorpresa que contienen esas piezas, algunas tan hermosas como «olvidarla es como intentar sacudirse un pelo de las manos mojadas» (página 17), «me llena de niebla, me abruma» (página 213), o «Cada vez que se anuncia a bombo y platillo un descubrimiento tecnológico ‘histórico’ y ‘maravilloso’ debería ser presentado bajo el mar, sobre la cubierta del Titanic» (página 215).
‘En esta red sonora’, ese archipiélago, acaba siendo un continente porque hay en todos sus fragmentos una unidad, una huella de familia, una relación de intimidad que los une, que los conecta sutil pero indisolublemente. Un libro con el que el lector podrá descubrir el pensamiento libre y, al mismo tiempo, sólido y profundo, de un autor exquisito.

En esta red sonora
Autor: Vicente Luis Mora
Editorial: Galaxia Gutenberg
Páginas: 320
Precio: 22,00 €
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