En la cumbre de la Alcazaba de Málaga, dispuestas en el zaguán de entrada y en los patios de Los Naranjos y de La Alberca, se exponen desde ayer escudillas, cuencos, platos, ataifores y albarellos con decoración nazarí que llevan al visitante al esplendor de la época Al Andalus con esta colección de piezas realizadas por gaditano Miguel Ruiz Jiménez.

Bajo el nombre de ´La Loza Dorada. Málaga y la cerámica en Al Andalus´, la muestra inaugurada ayer por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, forma parte del Festival de Cultura Andalusí, en el que, hasta el 15 de agosto, se desarrollarán conciertos, conferencias y exposiciones sobre la herencia del legado andalusí en Málaga. El Festival está organizado por el Ayuntamiento malagueño y el Centro de Estudios Al Andalus y de Diálogo de Civilizaciones.

Reproducciones. La exposición recoge un conjunto de cuidadas reproducciones de Loza Dorada de sello ´opera Malika´, es decir, obras cerámicas realizadas en Málaga y que eran exportadas a oriente y occidente durante el siglo XIII. Y es que, precisamente, esta ciudad fue el mayor centro de producción de Loza Dorada del Reino Nazarí de Granada; de ahí que ´opera Malika´ fuera una marca de calidad de la época, como explicaron los responsables de la muestra.

Así, están presentes en esta colección las reproducciones del ´Vaso de las gacelas´, basado en el original que se conserva en el Museo Hispano-Musulmán de la Alhambra, o el ´Vaso de Mazzara del Vallo´, que se encuentra en el Museo Galleria Regionale de Sicilia. El ´Vaso de las gacelas´ "es una de las muestras más hermosas producida en los talleres del Reino nazarí de Granada durante los siglos XIV y XV", indicó el alcalde, que explicó que la Loza Dorada es "una cerámica que se cultivó de manera exclusiva en nuestra ciudad".

Y es que la Loza Dorada era codiciada en todo el Mediterráneo y su producción se extendió por el norte de África y llegó a España de manos de los Omeyas.

En Málaga vivieron los creadores más destacados de este arte personal y único en la historia, cuyo máximo representante actual es Ruiz Jiménez.

Según aclaró este artista, que lleva más de 30 años investigando, la muestra se propone "recuperar los valores tradicionales de Málaga y parte de nuestro pasado". Para él, se trata de "una forma de vida, de cultura y de pensar que trasciende la misma obra de arte" y, como explicó, se produce "un diálogo con la materia, que es cambiante en cada momento y obra".

Técnicas. Las vasijas han sido elaboradas con las técnicas de modelado de las arcillas utilizadas en la antigüedad. "Dicha técnica cuenta con caligrafías geométricas, motivos vegetales y heráldicos", añadió el artista.

Preguntado por la dificultad de la elaboración de las piezas, Ruiz Jiménez indicó que las más complicadas han sido las que tienen azul cobalto, ya que conseguir ese color tan vivo "no es cosa fácil".

Málaga ha sido conocida por sus alfares desde el siglo X. El descubrimiento de numerosos hornos en barrios y zonas dedicados a ese fin confirman la tesis de los estudiosos que mantienen que el número de veramistas en Málaga en esa época era muy elevado, quedando señalada la zona de los alfareros incluso en la toponimia de la ciudad, como en calle Ollerías.