España ha descendido dos puestos en el ránking de mejores países para ser madre y ocupa el decimotercer lugar de la lista, que está liderada por Noruega y Australia y la cierra Afganistán, según el undécimo Índice Anual de las Madres de Save the Children. En el informe se analizan –entre una lista de 160 países, de los cuales 43 son desarrollados y 117 están en desarrollo– los mejores y peores lugares para ser madre en función de diez factores relacionados con el estatus educativo, de salud, económico, y político de las progenitoras, así como el bienestar básico de los hijos.

España se encuentra, entre otros, por debajo de Francia e Irlanda y por delante de Reino Unido y Suiza, además presenta una elevada esperanza de vida con 84 años, que es similar a la de Italia o Suiza y sólo superada por países, como Francia y Japón.

Además, tiene una baja tasa de riesgo de mortalidad materna ya que muere una mujer por cada 16.400 y tiene una tasa de mortalidad de menores de cinco años de cuatro por cada 1.000.

España tiene una "buena puntuación" en cuanto a la participación de mujeres en política, ya que ocupan el 37 por ciento de los escaños. En cuanto a salarios, el colectivo femenino gana 0,52 céntimos por cada dólar que gana un hombre.

La duración de la baja de maternidad en el país, que es de 16 semanas, está aún por debajo de otros países europeos como Reino Unido o Dinamarca con 52 semanas, Italia, con 20, Portugal con 17, lo que influye negativamente en la posición de España en el Índice de madres.

En cuanto a la comparativa por países, el informe señala que en Etiopía, tan sólo el seis por ciento de los partos recibe asistencia, mientras que en Noruega hay personal sanitario suficiente cualificado presente en prácticamente la totalidad de los alumbramientos. Una mujer de cada siete pierde la vida durante el embarazo o el parto en Níger, en tanto que por ejemplo en Grecia e Italia es menor de 1 de cada 26.000 y en Irlanda 1 de cada 47.600.