Entrevista | Patricia Perea Psicóloga

«El acoso es el problema, y no así el tamaño corporal o la apariencia»

La importancia de apoyar a niños y adultos a combatir el estigma de peso gana más importancia en los últimos meses, ya que muchos adolescentes usaban el contacto social como una forma de expresar emociones y ahora con el distanciamiento social incrementan la hipervigilancia sobre sus cuerpos y sensaciones corporales

Patricia Perea en una foto de archivo. | L.O

Patricia Perea en una foto de archivo. | L.O / Alba ROSADO. MÁLAGA

Alba Rosado

Patricia Perea es especialista en Tratamiento Psicológico de la Obesidad y Trastornos del Comportamiento Alimentario. En esta entrevista aborda cómo afectan en la infancia y la adolescencia.

¿Es la obesidad una enfermedad no sólo física sino social?

La etiopatogenia, es decir, las causas o mecanismos por los que se desarrolla o aparece la obesidad es muy variada. En ella podemos encontrar factores hereditarios o genéticos, factores socioculturales, familiares, biográficos y de personalidad. Aunque no existe un amplio consenso sobre las causas psicológicas de la obesidad, encontramos algunos puntos en común en muchos pacientes con este problema: baja autoestima, pobre autoconcepto, malos hábitos alimentarios y comorbilidad con otras psicopatologías. Aquí toma relevancia el papel de los profesionales especialistas en salud mental.

Muchos niños y niñas sufren bullying por su peso. ¿Cree que desde los colegios se trabaja lo suficiente estos temas?

Es cierto que desde hace un tiempo, los colegios muestran una clara iniciativa en cuanto a la prevención del bullying a través de charlas o talleres especializados. Desde diversas asociaciones se están llevando a cabo charlas en colegios sobre prevención de los trastornos de la conducta alimentaria, donde se aborda también el tema de la obesidad , ya que los niños con sobrepeso tienen más probabilidades de sufrir acoso escolar y por tanto que puedan debutar en un trastorno alimentario por la necesidad de evitar ese acoso. Pero esto no es suficiente, hay mucho que hacer todavía, sobre todo a nivel de concienciación social, ya que el estigma sobre la obesidad y el bullying es un problema social. Es importante recordar que el acoso es el problema, y no así el tamaño corporal o la apariencia. Cambiar el cuerpo de alguien no debería considerarse como la solución para las situaciones de acoso.

Por problemas de obesidad, los adolescentes son más proclives al suicidio, a las adicciones y además a ser víctimas de agresiones físicas y verbales ya muchos de ellos se deben enfrentar a un infierno todos los días en la escuela.

Los adolescentes han estado mucho tiempo delante de las pantallas viendo estereotipos en redes sociales. ¿Ha notado un aumento de los pacientes con TCA en su consulta?

He notado un aumento muy marcado de casos de trastornos alimentarios en consulta, e incluso me atrevería a decir que se han disparado los casos. El aislamiento que ya sufrimos durante la cuarentena, y ahora también con las restricciones que se implantan como medida para paliar los contagios han hecho que se reemplace el contacto social por el virtual. Muchas de estas personas usaban ese contacto social como una forma de comunicarse, expresar emociones y afrontar situaciones que no sabían como abordar de otra forma, y ahora o no lo tienen o está muy limitado, lo que lleva a incrementar sobre todo el sentimiento de soledad o aislamiento, y la hipervigilancia sobre sus cuerpos y sensaciones corporales.