Siniestralidad laboral

La cifra de muertes en el trabajo repunta en Málaga pese a la bajada de accidentes

Hasta abril se registraron 5.200 siniestros, un 3% menos, pero los casos de víctimas mortales suben de 6 a 8 y UGT pide refuerzo de controles

Una de las últimas concentraciones por una muerte laboral

Una de las últimas concentraciones por una muerte laboral / L. O.

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

La siniestralidad laboral en Málaga se mantiene de momento contenida en este 2021 pese a que muchos trabajadores que estaban en ERTE han vuelto ya a reincorporarse a sus empleos. El número de accidentes con baja en el trabajo hasta el mes de abril superó los 5.200 en la provincia, con un descenso del 3% en relación al primer cuatrimestre de 2020, aunque con la pésima noticia de que el número de siniestros mortales sí subió un 33% (de 6 a 8). Del total de accidentes contabilizados en los cuatro primeros meses de este año, más de 4.500 ocurrieron durante la jornada laboral y 761 fueron in itinere, es decir, en el desplazamiento al lugar de trabajo.

Por sectores, los servicios acumularon el mayor volumen de siniestros en el lugar de trabajo (2.669), seguido de la construcción (1.152), la industria (488) y la agricultura (199), según el avance de datos de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo y recogido ayer por el sindicato UGT. Las muertes en el trabajo en lo que va de año se han producido principalmente en el segmento de los servicios (5), mientras que el resto se dio en la construcción (los otros 3).

Las causas más frecuentes de los accidentes en Málaga son las originadas por «sobreesfuerzo físico, trauma psíquico, exposición a radiaciones, ruido, luz o presión» y, en segundo lugar, por las debidas a «golpes» o «movimientos» de los trabajadores.

En Andalucía, los accidentes de trabajo con baja aumentaron en Andalucía un 10,1 % hasta abril y sumaron 28.641. Sobre todo crecieron porcentualmente los mortales, un 26%, hasta registrar 48 fallecimientos.

El sindicato UGT, tras conocer los datos, lamentó que constatan, a nivel andaluz, un aumento de la siniestralidad laboral una vez superado el «efecto de la pandemia con la caída de la actividad, con muchos trabajadores en ERTE o teletrabajando».

«Lamentamos que estos datos no sean nada halagüeños y que volvamos a tener la alta siniestralidad laboral que venimos padeciendo desde la reforma laboral», apuntó el sindicato, que exigió un plan de choque y un aumento significativo de los inspectores de Trabajo y técnicos habilitados de la Junta de Andalucía para que puedan llevar a cabo de forma efectiva la vigilancia del cumplimiento de la normativa, así como el aumento de las sanciones.

Del total de accidentes contabilizados en los cuatro primeros meses de este año, 25.400 ocurrieron durante la jornada laboral y 3.241 fueron in itinere, es decir, en el desplazamiento al lugar de trabajo.

Según la gravedad, se han dado 28.246 accidentes leves con un aumento del 10,07% y los graves 347 (12,66%) y mortales 48 (26,32%) han sido los que más han aumentado, lo que supone que en estos primeros cuatro meses han fallecidos diez trabajadores más que en el 2020.

«Cada 2,5 días muere un trabajador en el tajo o dirigiéndose a él», denunció el sindicato.

Por sectores, el sector agrario ha recogido el mayor aumento, del 14,9%, y el de la construcción, con el 19,1%, donde aumentaron los accidentes mortales un 200%, pasando de cuatro a doce, una vez que se retomó la actividad económica tras el confinamiento del primer trimestre de 2020 por la pandemia, apuntó.

La federación de industria y construcción de UGT-A demandó una mayor dotación presupuestaria en la Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Junta de Andalucía y la creación de la figura del delegado de prevención sectorial para poder llegar a las pequeñas empresas sin representación sindical.