Coronavirus

El sector privado de Málaga ha sumado 2.000 millones a sus ahorros en la pandemia

Consolida un nivel de 26.800 millones en depósitos por la contención de gastos a lo largo del pasado año en capítulos como viajes, ocio y transporte

El consumo se retrajo mucho el pasado año

El consumo se retrajo mucho el pasado año / L. O.

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

El ahorro de las familias y las empresas malagueñas ha venido aumentando de forma considerable desde que se produjo el estallido de la pandemia debido al desplome del consumo que se produjo durante ciertas etapas del estado de alarma y a la decisión de aquellos con capacidad financiera suficiente de aumentar sus reservas de cara a un futuro aún incierto. Desde marzo de 2020 (cuando se declaró el estado de alarma), el incremento del dinero disponible en depósitos bancarios en la provincia ha sido del 8% y ha supuesto que el sector privado haya sumado cerca de 2.000 millones de euros a sus cuentas bancarias, a pesar de que la rentabilidad de este tipo de productos es ahora mismo prácticamente nula, ya que los bancos no están ofreciendo interés al cliente por este ahorro.

Así, el volumen de ahorro en Málaga se sitúa ahora en 26.828 millones, según los últimos datos publicados ayer por el Banco de España. El aumento más significativo se produjo en el segundo trimestre de 2020 (entre abril y junio), es decir, justo recién declarada la pandemia, y alcanzó un máximo de 26.965 a cierre del pasado año. El primer trimestre de 2021 ha dejado un ligerísimo descenso, algo lógico teniendo en cuenta que el consumo ha ido poco a poco normalizándose. En todo caso, se confirma que la crisis del coronavirus, más allá de su desastroso impacto en el PIB y en empleo, ha espoleado la apuesta por el dinero en cuenta como previsión a corto plazo.

El propio Banco de España ya señalaba hace unos meses una «bolsa de ahorro de carácter forzoso» que se ha dejado notar en la economía. Buena parte de ese ahorro se debe muy probablemente a todo lo que el año pasado se dejó de destinar a vacaciones u ocio, dadas las restricciones de movilidad que han estado vigentes hasta hace unos meses. La caída del consumo de los hogares fue, de esta forma, mucho más acusada que la de las rentas, puesto que estas últimas estuvieron sostenidas, en parte, por las ayudas públicas desplegadas para mitigar los efectos económicos adversos de las pandemia». Eso sí, la bolsa de ahorro extra acumulada desde el comienzo de la pandemia se concentra principalmente en las rentas altas.

El Banco de España prevé que una parte de este ahorro privado acumulado durante la pandemia «se libere», si todo va bien, en los próximos meses por el avance de la vacunación, la relajación gradual de las restricciones y la disminución «progresiva» de la incertidumbre sanitaria y económica. Esa liberación permitiría, a su vez, «imprimir un mayor vigor a la recuperación del consumo».

El economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, también afirmó hace unas semanas que con la pandemia, la población española ha acumulado unos 60.000 millones de euros de ahorro forzoso que, a lo largo de los próximos meses, podrían transformarse en gasto de consumo e inversión. Andalucía, como uno de los principales destinos turísticos del país, podría ser una de las zonas más receptoras de todo ese gasto.