Justo un mes después de que se iniciara en Estepona la operación ´Astapa´ contra la corrupción urbanística, el socialista David Valadez fue elegido ayer nuevo alcalde de la localidad. El hasta ahora concejal de Bienestar Social accede al cargo tras el ingreso en prisión del anterior regidor, Antonio Barrientos, por su presunta implicación en la citada trama.
Valadez, uno de los más críticos con la gestión de Barrientos, fue proclamado alcalde en un pleno extraordinario celebrado en la tarde de ayer donde contó con el apoyo de los concejales de su partido, del PA, de IU, de Estepona 2007, de Rafael Montesinos, y del edil Francisco Zamorano, expulsado provisionalmente del PSOE por su imputación en ´Astapa´.
Siguendo la línea que ya había anunciado previamente, el PP votó en contra ya que este partido aboga por la disolución del Ayuntamiento y la celebración de unos nuevos comicios. Por su parte, los tres ediles del PES se abstuvieron en la votación.
La abstención también fue el voto de dos de las ediles socialistas expulsadas provisionalmente del partido por su imputación, Asunción López y Mariví López, mientras que Marisa Rodríguez, también expulsada provisionalmente del PSOE, votó en contra del candidato socialista.
María Miralles, edil socialista, no acudió al pleno, sin que se conozcan las causas de su ausencia. Tampoco estuvieron los dos concejales del PES que no han abandonado su acta y que se encuentran actualmente en prisión, Manuel Reina y José Ignacio Crespo.
Al no haber obtenido Valadez los trece votos necesarios para tener la mayoría absoluta, su proclamación como alcalde se produjo por ser el candidato a la alcaldía de la lista más votada en las últimas elecciones.
David Valadez, que ocupa el sexto puesto de la candidatura socialista, accedió al cargo en esta rocambolesca situación por la dimisión del ex regidor Antonio Barrientos; por la expulsión de la numero dos del PSOE, Asunción López; debido también a la renuncia a ser candidato -durante la misma sesión plenaria- del numero tres, Rafael Duarte, y tras haber sido expulsados del PSOE los números cuatro y cinco, Mariví López y Francisco Zamorano, respectivamente.
En sus primeras palabras como alcalde de Estepona, David Valadez anunció que la primera medida será reducir "considerablemente" su sueldo. Además prometió transparencia y diálogo, al tiempo que hizo una invitación a la oposición para que "forme parte y tenga responsabilidades en los consejos de administración de las empresas municipales".
El nuevo alcalde considera imprescindible un consejo de redacción de los medios de comunicación municipales y reclamó tanto a la Junta de Andalucía como a la Diputación Provincial de Málaga que inviertan en Estepona con el objetivo de "financiar proyectos para la ciudad".
