Desde que su hijo murió, José Fernández Fuentes no ha vuelto a ser el mismo. Recuerda que su vástago habría cumplido 18 años recientemente y no entiende que la Ley del Menor sea tan permisiva en algunos de sus artículos sin diferenciar la gravedad de los delitos en relación a los periodos de internamiento. Por ejemplo, la reclusión preventiva para aquellos menores de 18 años no puede superar los nueve meses y, en el caso de que haya sentencia sobre su conducta delictiva, el periodo de privación de libertad en un centro no puede superar los ocho años de duración. No es la primera vez que el texto se pone en cuestión. La madre de Sandra Palo, una joven deficiente mental salvajemente asesinada por tres menores y un adulto, impulsa desde hace tiempo una lucha para que se endurezca la norma.

-¿Cómo se han tomado la noticia de la liberación de uno de los supuestos autores de la muerte de su hijo?

-Lo que queremos es denunciar que dentro de esos nueve meses de internamiento preventivo no se haya realizado el juicio, porque ha habido tiempo para practicar esas pruebas clave. Además, ya se le prorrogó de seis a nueve meses el internamiento. Se le trajo de Córdoba hasta aquí y se le dijo que iba a seguir dentro. Cuando me llamaron me lo tomé fatal. Y vamos a empezar a movernos, queremos hacer otra manifestación, porque esto hay que cambiarlo y tenemos preparadas muchas firmas para entregárselas a la jueza.

-¿El otro imputado sigue en Alhaurín de la Torre?

-Sí, está en prisión preventiva y puede seguir en esa situación hasta cuatro años. Nosotros y el fiscal le pedimos al otro la pena máxima, eso es lo que más nos duele, que se haya producido una muerte y la jueza se vaya de vacaciones.

-¿Cómo han llevado toda la investigación sobre la muerte de su hijo José Pedro?

-Nosotros estamos muy mal. Yo, que trabajo en un concesionario vendiendo coches, no tengo la cabeza en su sitio desde que pasó todo esto. Y mi mujer también está muy mal. Queríamos irnos ahora unos días de vacaciones, pero después de esto se nos han quitado las ganas. Hemos entrado otra vez en el pozo, estamos abajo. Yo sólo he salido, junto a mi mujer, para ver a la Virgen del Carmen, a la que le hicimos una ofrenda el otro día. Y recuerdo que mi hijo habría cumplido 18 años el viernes, sólo queremos que se haga justicia. Mi hijo sí que era menor de edad.

-Ustedes también están luchando para que se endurezca la Ley del Menor, una norma con la que no están de acuerdo al igual que ocurre con otras víctimas...

-Lo que nos molesta es que esto ha vuelto a ocurrir. No estamos de acuerdo con la Ley del Menor y no queremos que se produzca la muerte de otro joven para que se reforme.