"Es lo más bonito que se puede hacer en la vida. Él estaba muy mal y eso le dio calidad de vida. Fui la primera donante de Málaga. De eso hace ya 30 años. No tuve miedo en ningún momento". Su nombre es Rosario Ángel Fuentes, ahora tiene 65 años, pero todo sucedió cuando tenía 35, es decir, hace tres décadas. Le donó uno de sus riñones a su hermano. Fue la primera de la lista. Por aquel entonces la experiencia y la información eran evidentemente menores, pero no tuvo reparos en someterse a esta intervención por el bienestar de otro ser humano. Un acto valiente, desinteresado y solidario.

Un ejemplo a seguir que forma parte de la historia de la medicina de esta provincia, ya que fue la primera ´donante viva´ de riñón para el transplante renal número uno realizado en el hospital Carlos Haya. Concretamente fue el 17 de enero de 1979. Los resultados fueron exitosos.

Sin embargo el receptor, Antonio Ángel Fuentes, murió en el año 90 pero a causa del hígado. "Él con el riñón estuvo muy bien durante años, pero surgieron complicaciones de otro tipo", rememora a este periódico. Rosario recuerda los días previos a la operación: "Había gente que me decía que me lo pensara, que iba a ser el primero y que no se sabía cómo iba a salir, pero yo desde luego no me lo pensé. Hoy, 30 años después, le digo a las personas que tengan a un familiar enfermo que le echen valor, que no pasa nada. Yo estoy muy bien. Es lo mejor que se puede hacer en la vida".

Homenaje a los donantes. Precisamente, profesionales del Hospital Regional de Málaga ofrecieron ayer un homenaje público a los donantes vivos de riñón. El acto se enmarca dentro de las actividades programadas con motivo del Día Nacional del Donante de Órganos, que se celebra mañana miércoles.

Para los pacientes con insuficiencia renal crónica el transplante de riñón de donante vivo se considera como la primera opción terapéutica, indica el coordinador de Transplantes del Sector Málaga, Miguel Ángel Frutos Sanz. El director gerente del Carlos Haya, Antonio Pérez Rielo, realiza además un llamamiento a los futuros donantes y recuerda la evolución y los cambios que en estos años se han producido en esta materia. "Las cosas han cambiado y la sociedad ha mejorado. El sistema de transplante de España es mirado al menos yo diría con ´respeto´ desde Europa y Estados Unidos", sentencia.

El transplante de riñón de donante vivo es la "única modalidad" de tratamiento que evita entrar en diálisis. Cabe reseñar además que la diálisis continuada condiciona mayor presencia de enfermedades cardiovasculares, algunas de las cuales pueden aminorarse con el transplante de donante vivo. Los avances tecnológicos en cirugía laparoscópica o mínimamente invasiva y las mejoras en los fármacos para prevenir el rechazo han favorecido el aumento de donantes vivos, indican los profesionales médicos. Esta modalidad terapéutica aporta "mínimos riesgos" para el donante que puede vivir con "absoluta normalidad" y máximos beneficios para el receptor. Los transplantes funcionan una media de 20 años.

En estos 30 años se han practicado 21 transplantes de riñón de donante vivo, lo que representa un 1% de los casi 2.000 realizados hasta la fecha. Desde 2006, cuando comienza la extracción renal por cirugía laparoscópica se han realizado nueve con esta tecnología, que conlleva menos complicaciones. Normalmente los donantes vivos suelen ser familiares de los receptores o personas vinculadas afectivamente (parejas). A los donantes se les entregó ayer un diploma y una insignia.