Encarna Pulido, por entonces enferma de cáncer, recibió la visita de dos voluntarias de la Fundación Malagueña de Asistencia a Enfermos de Cáncer (FMAEC). Tanto le llegaron sus atenciones que, curada la enfermedad, hoy es una voluntaria más con casi cinco años de experiencia. "Para mí supone muchísimo, es mucho lo que me da porque la forma en que los pacientes llevan su enfermedad es una lección muy grande", confiesa.

Encarna es una de las 40 voluntarias que una vez a la semana pasa tres horas en el Hospital Clínico, dando conversación y compañía a los enfermos de cáncer. La Fundación firmó en 2005 un convenio con el centro para integrar este trabajo en el hospital. "La asistencia en España de Oncología y Enfermería está fenomenal, pero lo que hacemos dentro del hospital son labores que a lo mejor un enfermero hace en 5 minutos porque tiene que seguir con su trabajo", explica José Aldecoa, gerente de la FMAEC, que destaca que son los propios profesionales del Clínico los que les envían los pacientes. "Te pasan una lista y la psicóloga organiza los voluntarios en coordinación con el personal sanitario", cuenta.

"Todos tenemos algo que ofrecer y recibimos mucho", resume Paz, otra voluntaria, que señala que en función de lo que el enfermo quiera, las voluntarias (la inmensa mayoría son mujeres) se encargan de charlar con él, "ya sea del tiempo, o de comida". Lo importante es pasar el rato, ayudar a la familia realizando el ´papeleo´ que conlleva la convalecencia, sustituyendo en ocasiones a la misma familia o incluso con un pequeño servicio de peluquería para los enfermos que lo pidan.

De los 40 voluntarios actuales, 38 son mujeres y 12 de ellos han superado un cáncer. Para convertirse en voluntario hay que realizar un curso de formación con psicólogos y una entrevista personal. Y para dar una idea certera del volumen de trabajo, aquí va un dato: en el año 2009, el voluntariado ofreció 8.976 atenciones a enfermos y familiares en el Clínico.

"Lo importante es que ellos sepan que estamos siempre ahí", cuenta José Aldecoa. El gerente se encuentra en la nueva sede de esta fundación que el año que viene celebrará sus primeros diez años. El nuevo emplazamiento, en la avenida de Plutarco, 73, supone una gran ventaja para enfermos y familiares. "Estamos a cinco minutos de las Urgencias del Clínico. Antes, cuando la sede estaba junto a la plaza de Uncibay, a muchas personas se les hacía muy difícil venir del Clínico".

El cambio de sede ha repercutido en el volumen de trabajo de la fundación malagueña, que ha aumentado en más de un 35% sus atenciones a los pacientes.

Pero el trabajo de la FMAEC no se limita a la asistencia a enfermos en el hospital. La sede juega un importante papel ya que atiende a enfermos y familiares, dándoles asistencia psicológica, psiquiátrica y jurídica. Y todo gratis.

Con el cambio de sede, las asistencias psicológicas en 2009 han subido más de un 28% con respecto a 2008. En total, la fundación realizó 993 atenciones psicológicas.

Se da el caso además de que muchas de estas atenciones van dirigidas a los familiares de los pacientes. "Para los pacientes hay muchos recursos pero los familiares muchas veces están descolgados", cuenta Carmen Cabello, psicóloga de la fundación. En las terapias que ofrece la FMAEC "se trabaja mucho con ellos cómo relacionarse con la enfermedad y cómo reaccionar a las respuestas de los pacientes". En cuanto a éstos, para ellos supone una vía de escape, "y si tienen miedo o ansiedad, se le ayuda a llevarlo para adelante y a mejorar su calidad de vida", señala-

La fundación también trata a las personas que han perdido a un familiar. En concreto, cuenta con un ´taller de duelo´ para padres que han perdido a sus hijos. Miriam Afel-lat, la psicóloga del taller, cuenta que el objetivo es que los padres en esa durísima situación puedan hablar de sus experiencias "y mostrar todas sus emociones para sentirse mejor".

Miriam destaca que el dolor por la pérdida de un hijo "es indescriptible", hasta el punto de que no existe una palabra que defina a esta persona, cuando sí existen por ejemplo, las palabras ´viudo´ y ´viuda´ ante la pérdida de la pareja. "En esta situación se sienten identificados, se aprende de los otros y se llora".

A casi diez años de su nacimiento, la FMAEC ha conseguido que el 65% de sus ingresos provenga de actos que organiza y de las cuotas de socios. Torneos de golf y pádel, mercadillos solidarios o conciertos benéficos son el motor más importante de esta fundación benéfica de la que se puede conocer más llamando al 952 12 17 17 o consultando su página web: www.fmaec.org.